En su retórica habitual, Ortega calificó a los líderes religiosos como conspiradores y afirmó que “convirtieron los instrumentos católicos en objetos de crimen”.
El novio de la joven asesinada en Camoapa, Boaco, hizo revelaciones escalofriantes sobre los días previos al crimen, incluyendo el suministro de pastillas Lorazepam...