La persecución contra la Iglesia católica de Nicaragua ha vuelto a ser objeto de discusión en el Congreso de Estados Unidos, en especial la grave situación del preso político y obispo de la diócesis de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez.
Este jueves 30 de noviembre se llevó a cabo una audiencia sobre este tema en el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara Baja del Congreso, siendo presidida por el representante Chris Smith.
El expreso político Juan Sebastián Chamorro, explicó a través de la red social X, que en la audiencia «los testigos» han debido permanecer «detrás de un mural para no mostrar su identidad por (temor a) represalias de la dictadura» de Daniel Ortega.
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Fueron tres los testigos presentes, además de Deborah Ullmer, directora para América Latina del Instituto Nacional Demócrata.
Funcionarios estadounidense explicaron que la presentación detrás de un mural se realiza porque se toma en cuenta que el de Nicaragua es un regímen «altamente totalitario», donde la vida de estos corre peligro.
Resumen de la audiencia en el Congreso el día de hoy. pic.twitter.com/dEY52RlGlb
— Juan Sebastián Chamorro (@Jschamorrog) November 30, 2023
Juan Sebastián Chamorro afirmó que la comisión Cámara Baja del Congreso se comprometió a trabajar para lograr la liberación de monseñor Álvarez.
El obispo en febrero pasado fue condenado a 26 años y cuatro meses de cárcel, luego que se negó a ser desterrado junto a 222 presos políticos. También fue despojado de la nacionalidad nicargüense.
El régimen lo había acusado de supuesta «traición a la patria» y propagación de noticias falsas.
El martes 28 de noviembre el régimen de Daniel Ortega circuló varias fotografías sobre unas visitas familiares recibidas por el obispo, también divulgó un video sobre la supuesta cómoda celda en la que está encarcelado el religioso. Los críticos de la dictadura destacan que se trató de un montaje más ante las constantes denuncias de los abussos que sufre Álvarez, de quien no se sabía nada desde marzo pasado.