La dictadura de Daniel Ortega nacionalizó a otros dos hijos de la palestina Leila Khaled, según la edición de La Gaceta, Diario Oficial de Nicaragua, de este viernes 9 de agosto.
Bashar Fayez Rashid Helal, originario de Siria y con nacionalidad jornada, nacido el 25 de diciembre de 1985 en Damasco, pero que supuestamente es residente permanente en este país de forma continua e ininterrumpida desde hace cuatro años.
Bashar Fayez es hermano de Bader Fayez Rashid Helal, de origen jordano que fue nacionalizado como nicaragüense el pasado 5 de agosto, días después de la asistencia de Leila Khaled en la celebración del 19 de julio del 45 aniversario de la revolución sandinista.
Ortega le regala nacionalidad al hijo de la palestina Leila Khaled
Bader y Bashar Fayez son hijos que Khaled procreó con el médico palestino Fayez Rashid Hilal, quien falleció el pasado mes de septiembre de 2023 tras una larga lucha contra una enfermedad.
En la edición de La Gaceta también aparece Viviann Kamil Allaw, de nacionalidad libanesa, nacida el 16 de diciembre de 1991 en Wadi El Karam, como otra beneficiaria de la ciudadanía nicaragüense.
De ella no hay datos en La Gaceta que explique desde cuándo “reside” en Nicaragua, solo se lee que es “residente permanente en este país de forma continua e ininterrumpida”.
Regalan nacionalidad con llegada de Leila Khaled
La palestina Leila Khaled arribó a Nicaragua en compañía de Mohamed Farrara Lashtar, sobrino del fallecido dictador libio Muammar el Gadafi.
Estuvo en la tarima principal junto a los dictadores Daniel Ortega y Rosario Murillo, el 19 de julio, en conmemoración al 45 aniversario de la revolución sandinista, por lo que la asignación de estas nacionalidades podrían interpretarse como un premio de la pareja dictatorial hacia un personaje internacional que se muestra alineada con su proyecto político.
Régimen nombra como codirectora de Intur a una de sus nueras
Ortega y Murillo regalan ciudadanía nicaragüense a ex funcionarios acusados de corrupción y familiares de políticos que son cuestionados en sus países, que son premiados con un buen puesto en el Estado y salarios de ministro.
Además, regala estas nacionalidades mientras destierra a quienes ellos consideran sus adversarios, como fueron los siete sacerdotes que el día de ayer 8 de agosto llegaron a Roma. 316 personas fueron desnacionalizadas oficialmente por el régimen en 2023 como represalia por sus denuncias y críticas a las graves violaciones de derechos humanos que han cometido con mayor fuerza, desde 2018.