El 45 aniversario del Ejército no solo fue el escenario donde el dictador Daniel Ortega y el general Julio César Avilés, principal soporte de la dictadura, pronunciaron «discursos antiimperialistas». También será recordado como el día en que ambos premiaron a familiares cercanos con ascensos militares.
Ortega, quien por ley aprueba los ascensos a generales, elevó a general de brigada a su consuegro Marco Salas Cruz, jefe del Cuerpo Médico Militar y director del Hospital Militar. Salas Cruz es el padre de Noé Salas, esposo de Camila Ortega Murillo, hija de Ortega y Rosario Murillo.
Por su parte, Avilés ascendió al rango de coronel a su hermana, Alma Celeste Avilés Castillo, directora del área Materno Infantil del Hospital Militar, quien hasta la noche del 2 de septiembre ostentaba el rango de teniente coronel.
Salas Cruz es un reconocido traumatólogo-ortopedista, socio fundador del Centro Médico Bolonia y miembro del Salón de la Fama del Deporte Nicaragüense por su contribución a la medicina deportiva.
La hermana del jefe del Ejército es una prestigiosa ginecoobstetra que trabaja en el Hospital Militar desde 1990, según su perfil en LinkedIn. Tiene estudios en Bulgaria, un país que, aunque no formó parte de la Unión Soviética, fue cercano a Moscú durante la Guerra Fría y estuvo gobernado por comunistas hasta 1989.
Seis nuevos generales
Además de Salas, en la noche del 2 de septiembre, Ortega ascendió a otros cinco generales de brigada, en presencia de representantes militares de China, Rusia, Venezuela, Cuba, México y varios países de Centroamérica (exceptuando Costa Rica, que no tiene ejército). Este rango es el tercero en importancia dentro del Ejército, solo superado por el de mayor general (actualmente ostentado por el jefe del Estado Mayor y el inspector general) y el jefe del Ejército.
Entre los nuevos ascendidos se encuentra Francisco Noel Jarquín López, segundo jefe de la Dirección de Investigación para la Defensa (DID), el temido órgano militar sucesor de la Seguridad del Estado de los ochenta, que ha espiado a opositores y periodistas críticos de la dictadura.
Jarquín López era uno de los dos subdirectores de la DID, junto con el coronel Álvaro Peña, quien tiene vínculos cercanos con los órganos de inteligencia de Rusia. No está claro qué sucederá con su superior, el general de brigada Rigoberto Balladares, señalado de suministrar información de inteligencia a la Policía durante la crisis de 2018 para facilitar la represión de los tranques.
Según *Confidencial*, Balladares fue removido de su cargo en junio pasado por órdenes directas de Rosario Murillo, pero esos cambios aún no han sido oficializados. Por regla general, no pueden coexistir dos generales en una misma dirección.
El otro consuegro
Salas no es el único consuegro de Ortega que ostenta un cargo de poder. El otro consuegro, Francisco Díaz, es el jefe de la Policía. EL jefe policial es el papá de Blanca Díaz, esposa de Maurice Ortega Murillo, director de Canal 13 e hijo de Ortega y Murillo.