La vicedictadora Rosario Murillo se quejó en su intervención del jueves 7 de noviembre por supuestas usurpaciones de funciones en la secretaría general del Sistema de Integración Centroamericana (SICA), que le corresponde a Nicaragua, pero que no ha sido posible retomarla por proponer candidatos. que son operadores políticos del régimen. “Es hacer fraude, es una secretaría fraudulenta, usurpadora, acéfala”, dijo la vocera del régimen, de manera irritada.
Murillo leyó eufórica que el canciller envió una carta de protesta donde hace referencia a una comunicación “ofensiva” para el régimen sandinista, remitida el martes 5 de noviembre desde la “denominada” Dirección Ejecutiva, que pretende llevar a cabo una agenda de trabajo de la secretaria general del SICA.
“Denominada, sí, una forma toda rara de estar presentando a ese SICA que está acéfalo. ¿Por decisión de quiénes? Bueno, eso sabemos, lo sabemos”, dijo Murillo.
“Hay una denominada dirección ejecutiva, y esa carta que suscribe esa dirección ejecutiva comunica y solicita a los gobiernos de los países SICA analizar una propuesta de agenda de trabajo y un proyecto de presupuesto, que no existe porque está acéfala, y quieren que se analicen. agendas y presupuestos desde una Dirección Administrativa que no corresponde, según todas las Normativas del SICA… Agenda y Presupuesto para el año que viene”, leyó como parte de la carta de protesta enviada.
No lograrán obtener Secretaría General del SICA
La secretaría general del SICA se encuentra vacante tras la repentina renuncia del nicaragüense Werner Vargas , el 15 de noviembre de 2023. La elección de Vargas rompió un impasse de más de un año, dado que no existía consenso en torno a las propuestas presentadas por Nicaragua , país que, por un acuerdo de alternabilidad, le correspondería la secretaría general del SICA para el periodo 2021-2026.
Después de esto, el régimen propuesto entre la terna de candidatos a su entonces ministro asesor para políticas y asuntos internacionales, Valdrack Jaentschke , para culminar el período que le corresponde. Pero no lo logró tras cartas de protestas enviadas por organizaciones opositoras denunciando que el diplomático se dedica a ser un espía y operador político de la dictadura.
Después, la dictadura presentó como candidatas a Arling Patricia Alonso Gómez , diputada del Frente Sandinista; María Amelia Coronel Kinloch , titular del Ministerio del Interior y Sonia Castro , quien recientemente fue ratificada como asesora presidencial con rango de ministra para asuntos de salud. Todas ellas sancionadas por Estados Unidos y que, según la organización Monteverde, están incapacitadas para tomar ese cargo porque podrían poner en riesgo al SICA.
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Murillo siguió leyendo molesta
Murillo siguió leyendo molesta la nueva alternativa que está buscando el SICA para continuar con sus proyectos regionales.
“Nuestro gobierno denuncia y rechaza de manera categórica cualquier intento de usurpación, porque eso es, de la figura del Secretario General del SICA de parte de esa denominada Dirección Ejecutiva. Sólo es una oficina administrativa interna que no tiene ninguna competencia para ejercer atribuciones que sólo corresponden a los Estados miembros ya la coordinación que ejerce el Secretario General del SICA”.
“Esa llamada dirección ejecutiva tampoco tiene facultad para comunicarse con los Estados miembros. No debería. Están usurpando la Secretaría General del SICA . No pueden comunicarse sobre ningún asunto político, administrativo, u operativo, porque eso es del ejercicio exclusivo del Secretario General del SICA”, prosiguió leyendo irritada.
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Murillo manifestó que su régimen rechaza que la oficina antes mencionada someta a los Estados miembros una agenda de trabajo. “¿Qué es eso? Y un presupuesto. ¿Para qué gastos si no hay Secretaría General? Ese órgano está acéfalo”.
“¡Están usurpando! ¡Lo denunciamos, lo rechazamos! Y contrario a todos los reglamentos y todos los protocolos que rigen la vida institucional del SICA, están autodenominándose, de hecho, secretarios generales. ¿Qué es eso? No está nombrado el titular del órgano establecido por el Protocolo de Tegucigalpa, por lo tanto, no pueden continuar comunicando nada a los Estados miembros sobre asuntos del SICA”, mencionó Murillo.
“Así, cumpliendo con las normativas, los protocolos, todo lo establecido para el funcionamiento de nuestro sistema es que vamos adelante; lo contrario es hacer fraude, es una secretaría fraudulenta, usurpadora”, tildó Murillo.