Las asociaciones que aún quedan en Nicaragua serán sometidas bajo una supuesta “alianza de asociación” para ser controladas por el régimen sandinista. Este nuevo modelo de trabajo se centrará en controles financieros y las organizaciones se verán obligadas a llenar un formulario para reportar cuánto dinero van a recibir por proyecto, quién lo patrocinará, quién maneja el dinero y cómo lo van a ejecutar.
Filiberto Rodríguez, diputado sandinista y considerado por opositores nicaragüenses como el verdugo de las oenegés, explicó a través de una entrevista el nuevo modelo de trabajo engorroso, que en realidad es una forma de fiscalizar los recursos financieros, y con el que lograron tener “más control” con los organismos no gubernamentales que aún quedan en el país.
Régimen elimina 169 ONGs más, entre ellas Save the Children Canadá
El nuevo método de trabajo, según ejemplifica Rodríguez, se basa en que los organismos independientes deben notificar al Ministerio del Interior previo a un proyecto aprobado y notificar cuánto dinero van a recibir del exterior para ejecutarlo, por lo cual el organismo debe inscribirse en una alianza de asociación en el Ministerio del Interior y le entregarán un formulario.
“¿De dónde vienen los recursos? ¿Quién le asigna los recursos? ¿Cuándo llegan los recursos? ¿En cuánto tiempo usted piensa ejecutar el proyecto? ¿En el primer año cuánto va a avanzar el proyecto? Todos estos aspectos que voy transparentando en una alianza de asociación, eso va a permitir que yo como estoy aliado a desarrollar, el Ministerio del Interior me dice: «entonces usted va a trabajar coordinado con el Marena, con el Inafor»”, detalló Rodríguez como parte del cuestionario que deben llenar.
Ministerio del Interior autorizará proyecto
Si el Ministerio del Interior aprueba el formulario, después el organismo no gubernamental se reunirá con la institución pública para programar y ejecutar el proyecto.
Rodríguez indicó que las últimas organizaciones sometidas al régimen sandinista que aún operan en Nicaragua, “quizás ya no tengan nada que ver con las que ya se fueron en el avión” de los 222 presos políticos desterrados a Estados Unidos.
“Pero no significa que no sean blanco de lavado de dinero, blanco de lo que trasiegan la narcoactividad, el crimen organizado”, acusó Rodríguez. “En todas partes son blancos pero también son parte de alianzas con organismos del imperio que lo que hacen es traer recursos para desestabilizar al gobierno”.
La dictadura usa el término crimen organizado para referirse a grupos opositores e inventar delitos de supuesto lavado de dinero.
Rodríguez afirmó que ahora el régimen “tiene mayor control” de los organismos. “Hay bastante apego a las leyes, hemos mejorado las leyes, hemos actualizado las leyes”.
Las reformas a las leyes
La Asamblea Nacional, controlada por la dictadura, reformó el 20 de agosto la Ley de Regulación y Control de Organismos Sin Fines de Lucro (Ley 1115), a la Ley de Regulación de Agentes Extranjeros (Ley 1040) y a la Ley de Concertación Tributaria (Ley 822), para obligar a las organizaciones a hacer “alianzas” con entidades públicas y quitarles exoneraciones fiscales.
La reforma a Ley 822 tiene como fin retirar cualquier tipo de exenciones fiscales a iglesias nicaragüenses de cualquier denominación, por lo que ahora el régimen se fue contra las ofrendas, diezmos y limosnas.}
Empleados públicos tendrán nueve días de vacaciones en septiembre
El 29 de agosto se eliminaron 169 organismos más, entre ellos Save the Children Canadá y Feed The Children Nicaragua, que ayudaban a niños de escasos recursos.
El 22 de agosto se disolvieron 151, entre ellas la Cámara de Comercio Americana de Nicaragua (Amcham) y la Federación Nicaragüense de Zonas Francas.
El 19 de agosto eliminaron 1,500 organismos de un solo tajo, el paquete más grande registrado a raíz de 2018, cuando Ortega-Murillo comenzó su guerra contra las oenegés no gubernamentales, y se suman al menos 5,664 mil organismos cerrados en Nicaragua.