En una conferencia de prensa ofrecida por un grupo de nicaragüenses a los que la dictadura de Daniel Ortega les despojó de su nacionalidad, la exguerrillera Mónica Baltodano increpó no solo al presidente de Brasil, Luiz Ignacio Lula da Silva, si no a los gobiernos de las naciones centroamericanas a manifestarse respecto a las “atrocidades” que están ocurriendo en Nicaragua.
“Quiero aprovechar este espacio para hacer un llamado enfático al presidente Luiz Ignacio Lula da Silva, a Brasil, al Partido de los Trabajadores, que no es posible que sigan guardando silencio con respecto a lo que está pasando en Nicaragua. Lo que pasa es totalmente contradictorio con los ideales democráticos y de justicia que ellos han enarbolado”, increpó Baltodano.
La exguerrillera y compañera de lucha del ahora dictador de Nicaragua, también llamó a los gobiernos centroamericanos a que “se manifiesten en contra de esta atrocidad” que es “absolutamente inadmisible dentro de la democracia y los regímenes modernos de los que estamos rozando en muchas partes del mundo actualmente”.
“Cualquier cosa se puede esperar de una dictadura cruel”
Durante la conferencia de prensa denominada “Somos y seguimos siendo nicaragüenses”, organizada por el Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más, varios de los panelistas fueron consultados sobre las últimas acciones que ha venido realizando el régimen de Ortega específicamente contra los 94 nicaragüenses despojados de su nacionalidad, declarados prófugos de la justicia y a quienes les confiscaron sus bienes.
El economista y analista político Enrique Sáenz, quien forma parte de este grupo de 94 nicaragüenses, expresó que “cualquier cosa se puede esperar de una dictadura cruel, de una dictadura despiadada” como la dirigida por Daniel Ortega y Rosario Murillo.
“Hay una serie de derechos vulnerados aquí en el tema de las pensiones vamos a actuar legalmente no solo en las instancias internacionales si no que también en instancias jurisdiccionales. Igual en el tema del despojo de nuestra nacionalidad, ya estamos emprendiendo acciones ante las instancias competentes porque en este caso particular se trata de una acción prácticamente medieval, nacisista que solo tiene antecedentes en las más crueles dictaduras”, detalló Sáenz.
Confiscación de pensiones es “cruel e inhumano”
En este mismo sentido se refirió el exguerrillero y exmiembro del Frente Sandinista, Moisés Hassan, quien expresó que “la confiscación de las pensiones de retiro… es un acto sumamente cruel e inhumano” debido a que una buena cantidad de estas personas dependen de esos recursos para vivir.
“(Confiscación de pensiones) es un acto en el se que atenta contra la seguridad, la estabilidad y la vida, la supervivencia de algunas familias”, expuso el exguerrillero catalogando de “actos brutales” las acciones emprendidas por el régimen contra este y otros grupos de nicaragüenses desterrados.
“Quiero remarcar que todos estos actos brutales, violadores de todo principio humanos, de toda ley nacional e internacional son una muestra de que la brutalidad se está usando para tratar de mantener cohesionada a sus bases, ellos saben que sus bases están temblando”, refirió Hassan, comparando la situación con lo que vivieron los seguidores de Somoza que “pagaron con sus vidas, su libertad, sus bienes, los crímenes que habían apoyado del somocismo”.
Demandaron liberación de presos políticos
Los participantes en la conferencia de prensa dejaron en claro que son y seguirán siendo “nicaragüenses hasta el fin de nuestros días”, aunque la dictadura no lo quiera. Además demandaron la liberación de los más de 35 presos políticos que el régimen mantiene encarcelados en sus mazmorras y particularmente la liberación de monseñor Rolando Álvarez.
En cuanto a las propiedades confiscadas por el régimen dijeron desconocer la situación que viven las personas que habitan en algunos bienes inmuebles y que otros prefieren no denunciar por seguridad de sus familiares que viven en Nicaragua.
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