La dictadura de Daniel Ortega materializó la confiscación de la casa del defensor de derechos humanos, Gonzalo Carrión, y la del exguerrillero sandinista Moisés Hassan. Ambos forman parte del grupo de 94 nicaragüenses que fueron despojados de su nacionalidad el 15 de febrero de este 2023.
“Confirmo, es nuestra casa y se materializa el asalto, el robo y la invasión a nuestra casa (…). Hoy una cuadrilla de asaltantes están despojándonos para dársela no sé a quién, seguramente a alguien que no tiene la más mínima vergüenza de ocupar lo que no le pertenece. Esa casa es un esfuerzo de mi esposa, mío y de mis hijas. La compramos mediante una deuda que pagamos durante más de 15 años consecutivos”, expresó Carrión a través de una nota de voz este lunes 11 de septiembre.
Carrión dijo que su casa, que está situada en Altos de Nejapa, Managua, «era lo único de valor material que le estaríamos heredando a nuestras hijas, por ahora asaltada por los criminales de lesa humanidad, que además de criminales, asesinos, también son ladrones. Es lo único que ofrecen para el país. Yo esa noticia la recibí con mucha indignación (…), con mucha firmeza rechazo en nombre de mi familia ese asalto de los hace cínicos de los criminales de lesa humanidad y ladrones”.
En tanto, la casa de Moisés Hassan, ubicada en Reparto Belmonte en Managua, fue confiscada por agentes de la policía este domingo 10 de septiembre.
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Para Hassan este es un acto “contra todos los derechos ciudadanos, humanos”, y considera que por estos abusos “el país se encuentra en esas condiciones tan duras, tan difíciles. Una situación totalmente fuera de orden”.
El exguerrillero contó a Nicaragua Investiga que la vivienda no estaba siendo habitada desde que lo despojaron de su nacionalidad en febrero, pero que meses atrás logró sacar de su casa la mayoría de muebles.
Régimen se adueñó de casas, pensiones y cuentas bancarias
El régimen de Ortega no solo quitó la nacionalidad a Hassan y le confiscó su casa, sino que le congeló su pensión de jubilado y su cuenta bancaria en Banpro, esto como parte de las disposiciones al ser declarado apátrida.
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Cabe mencionar que la dictadura sandinista después que retiró la nacionalidad a los 94 nicaragüenses, ordenó despojarlos de sus bienes. Días después fueron allanadas las casas de la periodista Sofía Montenegro y la activista Azáhalea Solís.
En marzo, el régimen sandinista también se apropió de la casa de Anibal Toruño, dueño de Radio Dario.
Nicaragua Investiga
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