El director general de la Policía de Nicaragua, primer comisionado Francisco Díaz, se reunió este 20 de septiembre con Wan Xiaohong, Ministro de Seguridad Pública de China, con quien abordó la posibilidad de establecer “convenios” para que el gigante comunista capacite a los policías nicaragüenses.
“Los funcionarios conversaron sobre la posibilidad de establecer convenios de cooperación y colaboración entre nuestros pueblos y gobiernos, para la capacitación del personal de la Policía Nacional de Nicaragua en materia de seguridad ciudadana, prevención e investigación del delito, así como la provisión de técnica policial y de tecnologías para el enfrentamiento al crimen organizado, narcotráfico Internacional, ciberdelito y terrorismo”, dice una nota de prensa de la institución.
«El Primer Comisionado Francisco Javier Díaz Madriz, propuso el intercambio de experiencias y buenas práctica de nuestro exitoso modelo policial de protección a las personas, familias y comunidad», agrega la nota.
La visita a China de Francisco Díaz se dio en marco del Foro de Cooperación Global de Seguridad Pública que se realizó el país asiático desde el 19 al 21 de septiembre.
Institución sancionada
Hay que señalar que la Policía de Nicaragua está señalada por el Grupo de Expertos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) por cometer crímenes de lesa humanidad en el marco de las protestas antigubernamentales iniciadas en abril del 2018.
La institución y sus principales jefes están sancionados por Estados Unidos y la Unión Europea. Uno de los casos más emblemáticos es el comisionado general Ramón Avellán, sancionado por Estados Unidos el 7 de noviembre del año 2019. Washington le atribuye al menos 107 crímenes de opositores al régimen de Daniel Ortega.
Alianza con China no le sirve a Ortega
Danny Ramírez, secretario ejecutivo del Centro de Asistencia Legal lnteramericano en Derechos Humanos (CALIDH), considera que el régimen con estas alianzas lo que busca es “demostrar” que está acuerpado por un país poderoso.
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“La idea de que los chinos instruyan a personal nicaragüense, específicamente de la policía es evidencia de que el régimen quiere enviar una idea de que tiene una acuerpamiento internacional (…) quiere evidenciar que tiene respaldo de una de las grandes potencias del mundo y también vive acercándose a Rusia, pero al final esas dos alianzas no les sirven de nada”, señaló Ramírez.
Agregó que Ortega lo que hace es “autoengañarse queriendo proyectar un respaldo internacional que lo único que le ayuda es a que siga su impunidad en cuanto a las violaciones de derechos humanos porque China y Rusia tienen el poder de vetar en el Consejo de Seguridad que ellos puedan ser juzgados por la Corte Penal Internacional, eso es lo único que puede conseguir Ortega en estos momentos”.
Es importante señalar que China es un régimen dictatorial de partido único, en el que las voces disidentes no están permitidas.
Nicaragua Investiga
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