Dentro de un barril fueron encontrados en Costa Rica los cuerpos del nicaragüense Francisco Alfonso Mejía Díaz, alias «Chayanne», de 31 años, y el de su novia, Alanis Daniela Menéndez Monge, de 19 años.
El macabro hallazgo se registró dentro de una alcantarilla en Bijagual de Garabito, en la provincia de Puntarenas.
Según las autoridades de Costa Rica, Mejía Díaz era un sicario a sueldo de Ronny Danilo López González, alias Oso, también de nacionalidad nicaragüense, un peligroso delincuente involucrado en el asesinato del policia Bryan Rivera Oviedo, ocurrido el 24 de enero en Herradura de Garabito.
“Hemos visto que hay coincidencia en los tatuajes de ambas personas, tenemos en un 99% la probabilidad o certeza de que se trata de ellos. Es lamentable, pero cuando se dan estas situaciones entre grupos criminales pues generalmente o los mata un grupo rival o el mismo grupo al cual están adscritos”, Randall Zúñiga, director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Aún no se sabe quien es el responsable del crimen de Mejía Díaz y su novia, pero se creen pudo ser el mismo López González el que lo ordenara el asesinato, por una supuesta venganza.
Ayer lunes en los Tribunales de Justicia de Puntarenas se llevó la audiencia contra López González, por el asesinato del agente policial. En el caso también está siendo señalado del crimen Carlos Martínez Paladino, alias Tuerto.