A estas alturas del avance de la pandemia del Covid-19 en Nicaragua, la población ya conoce sobre las medidas de mitigación del virus, que incluyen el lavado de manos constante y el distanciamiento físico. Sin embargo, poco se conoce sobre las medidas de diagnóstico temprano para evitar que la enfermedad progrese y el cuadro empeore.
El doctor Carlos Rodríguez comparte que es importante conocer la cronología de la enfermedad, para así llevar un monitoreo adecuado y aplicar los debidos tratamientos.
Es importante reconocer que todos los pacientes inician con una fase viral normal, y que solo el 20% de los casos de Covid-19 se convertirán en cuadros severos, por lo que es necesario dar seguimiento al estado del paciente y atender con anticipación los primeros signos de deterioro.
Fase viral
La primera fase de la enfermedad es la viral, que abarca los primeros seis días desde el contagio.
En esta se presentan los síntomas iniciales, los cuales pueden ser síntomas comunes como fiebre y tos, o síntomas atípicos como perdida del olfato o diarrea.
Durante estos seis primeros días, el Dr. Rodríguez destaca que el virus está en el organismo y se está reproduciendo a gran velocidad en la faringe, para luego bajar a los pulmones y entrar a la siguiente fase.
Los síntomas más comunes son la fiebre y tos, por lo que durante estos días el tratamiento recomendado es la administración de ibuprofeno o acetaminofén, o medios físicos como paños fríos.
Si se presentan síntomas como diarrea o vómitos, lo ideal es beber suero.
La clave es tomar medidas comunes y puntuales para tratar la sintomatología que está presentándose.
Uso del oxímetro
A partir del día 5 o 6 es necesario comenzar a tomar la saturación de oxígeno con un oxímetro.
El Dr. Rodríguez asegura que, si “todo sospechoso de Covid tuviera acceso a un oxímetro de pulso, y detectaran el inicio de baja de oxígeno, muchísima gente se salvaría, pero el problema es que la gente desconoce esto, desconoce que existe este aparatito, desconoce por qué es que la gente se muere”.
La saturación en los niveles de oxígeno debe mantenerse arriba del 95%, y si un paciente llega así hasta el día 14, entonces ya salió de la enfermedad y no se va complicar.
Pero si hay desaturación el día seis o siete, entonces ya es un hecho de que se va a necesitar oxígeno, y este sería el momento indicado para ir al hospital o comprar un tanque, llamar a un médico y colocarse el oxígeno desde casa.
El oxímetro resulta clave para un adecuado control y seguimiento de la evolución del virus, esto definirá si se trata de un cuadro severo o no.
Fase pulmonar
La fase pulmonar, se encuentra entre los días seis y siete, y solo el 20% de la población entra en esta, el problema es que no hay forma de saber quién entrará y quién no, pueden ser ancianos o jóvenes.
Hasta esta fase es que puede recurrirse a la realización de una radiografía, y esta se toma únicamente para ver la severidad de la enfermedad, por ello no se debe hacer antes de este tiempo, ya que no es un método diagnóstico.
En la fase pulmonar el organismo ataca al virus de una forma tan agresiva que “el mismo cuerpo comienza a desbaratar al mismo pulmón. Es una respuesta exagerada del organismo para tratar de detener al virus, que termina siendo más dañina” explica el doctor.
Si durante esta fase ya se había presentado una baja saturación de oxígeno y se recurrió a la oxigenoterapia, entonces ya se han disminuido las posibilidades de que se necesite intubarse, por ello es importante hacer el diagnóstico temprano.
Pero, si continúa bajando el nivel de oxígeno en la sangre o la oxigenación no fue administrada a tiempo, aumentará el daño pulmonar.
En los días 14 y 15, los días ya finales, la inflamación del pulmón será tan grande que el resto de órganos del cuerpo iniciarán a fallar y el paciente entra en un estado crítico donde necesita ser intubado hasta que el pulmón se recupere y pueda nuevamente respirar.
El problema es que al ser intubados solamente se logra ayudar al 50% de estos pacientes.
De igual forma, una técnica efectiva que puede implementarse es la posición de prono, ya que como el Covid-19 daña la parte baja y trasera de los pulmones, si se está acostado hacia arriba toda la sangre se va a mover por gravedad a la parte dañada, entonces se va a respirar y oxigenar peor. Mientras que, en la posición de prono la sangre se mueve a las partes menos afectadas y se oxigena mejor.
Baja en niveles de oxígeno casi imperceptible
Cuando los pacientes tienen una severa disminución en los niveles de oxígeno en sangre, esto sucede de forma tan paulatina que no pueden ni percibirlo, y esa es la razón por la cual “los pacientes caen muertos en la calle”, detalla el doctor.
“El paciente está con el oxígeno bajo, y luego cuando sale a la calle y quiere hacer cosas, la cantidad de oxígeno en su cuerpo no es suficiente, el paciente se desmaya y se muere, esa es la llamada hipoxemia silenciosa”.
Pruebas alternativas
Como en Nicaragua no todos tienen acceso a las pruebas del PCR (Prueba de Reacción Polimerasa), el Dr. Rodríguez comparte que hay exámenes que funcionan para monitorear a los pacientes e incluso sirven para saber el pronóstico antes que el paciente se enferme.
El también llamado PCR (Proteína C Reactiva), el cual es un mediador de inflamación, muestra la cantidad de proteína C que genera el Covid, y asegura que, si un paciente en la fase viral inicial tiene un PCR mayor de 20, probablemente va a tener una neumonía severa y va a necesitar oxígeno.
Otra manifestación es que el Covid-19 crea varios coágulos en la sangre, por lo que también se pueden realizar exámenes de coagulación.
El Dr. Rodríguez destaca que lo importante es reconocer que el hecho de contraer Covid-19 no es una señal de que la persona va a morir, sino que con un adecuado seguimiento y de reconocer el momento exacto en el cual ya es necesario recurrir a la oxigenación o a un hospital, los cuadros severos pueden mantenerse sin mayores complicaciones.
Javier Solís
julio 12, 2020 at 6:44 am
Excelente reporte muchas gracias por su labor informativa