Vestido con capa y casco, el presidente Nicolás Maduro, convertido en superheróe de dibujo animado, enfrenta a sus enemigos en un cómic de un minuto transmitido por la televisión pública venezolana.
La primera escena muestra a un personaje que simula ser el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump. Desde la Casa Blanca, levanta el teléfono para reprender a dos opositores venezolanos, a quienes recrimina: “¡No pueden tumbarlo! Es un simple chofer de autobús», dice el personaje de Trump sobre el mandatario venezolano.
Entonces, mágicamente, Trump decide dejar sin luz a Venezuela. Es allí cuando entra, cual Superman, un dibujo animado de Nicolás Maduro, más delgado que en la realidad, que se hace llamar Superbigote, y con sólo su puño de hierro logra restituir la electricidad.
EE. UU. entrega tanquetas a Colombia para reforzar seguridad en la frontera con Venezuela
«Yo creo que el uso del hierro, del golpe de la fuerza, de la esbeltez, de la juventud, es una manera de reedificar la figura del nuevo líder del Partido Socialista Unido de Venezuela», dijo Naky Soto, especialista en comunicación para el desarrollo, quien durante años ha preparado a líderes políticos en oratoria.
Superbigote es una burla
Con la mirada fija en su celular, Eleidy Muttach, encargada de un restaurante en el estado Aragua, no puede ocultar la rabia al ver el animado. «Son sentimientos encontrados, porque mientras tú estás debatiendo con la culpa de dejar tu país, porque no aguantas la situación, te encuentras con eso. Una burla para los venezolanos. Una persona que supuestamente nos dirige, se burla», dijo a VOA Muttach, quien piensa emigrar este año.
Ya Maduro se había referido a sí mismo como “Superbigote“, respondiendo al expresidente de Ecuador Lenín Moreno, quien lo acusó de financiar protestas en su país en 2019.
Maduro despoja de competencias a un gobernador opositor
«Yo estoy pensando qué gobierno puedo tumbar, con mis bigotes, Superbigote, yo no soy Superman, soy Superbigote», bromeó Maduro entonces.
Una estrategia de distracción
La periodista y experta en mercadeo político Anyelitz Yánez cree que detrás del dibujo animado hay una estrategia para distraer la atención sobre otros asuntos, como las denuncias de irregularidades en las elecciones regionales del 21 de noviembre.
«No sabemos si están intentando hablarle a una audiencia más joven, a una audiencia que está desconectada con la política, pero sin lugar a dudas, lo que Venezuela, en general, está sintiendo, es que esto es una burla», explicó Yánez.
La estratega recuerda que ya antes el oficialismo ha caricaturizado a sus oponentes.
«A alguien [del equipo de Maduro] le ha parecido que, comunicacionalmente, el asunto de los videos en cómic o caricaturas funcionan mejor que los ataques políticos o videos políticos en general. Entonces, están replicando el modelo, pero esta vez con Maduro como el superhéroe, como el salvador, porque además, te está diciendo que es un país donde no hay poderes, donde no hay nada. Él es el que resuelve», destacó.
Por ahora sólo se ha emitido un capítulo de Superbigote y se desconoce si se preparan nuevos episodios.
You must be logged in to post a comment Login