La dictadura Ortega-Murillo cerró el lunes 19 de agosto, en el paquete de 1,500 organismos no gubernamentales, International Air Transport Association y las autoridades nicaragüenses dieron por hecho que se trataba de una oenegé y le cerraron las cuentas bancarias a la Asociación Internacional de Transporte Aéreo, bloqueando el mecanismo de viaje que utiliza de Nicaragua para emitir boletos aéreos.

Según La Prensa, el medio que publicó la información este viernes 23 de agosto, International Air Transport Association que estaba registrada en Nicaragua tenía muchos años de no operar y no tenía representante ni oficinas en Managua. 

Las cuentas de banco que cerraron las autoridades nicaragüenses no eran de esa organización, sino las de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés), que no es una oenegé, sino el ente regulador del transporte aéreo global fundada en 1945.

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“Primero que nada es una tremenda estupidez esto que hicieron y denota una gran ignorancia de quien haya tomado esa decisión. Actúan con el hígado y sin darse cuenta de las barbaridades que cometen”, dijo un empresario del sector turístico a La Prensa que por temor a represalias evita identificarse. 

“Están afectando el trabajo de una gran cantidad de agencias de viajes que funcionan en Nicaragua y haciendo más difícil su trabajo. Crean obstáculos innecesarios a empresarios pequeños y medianos que lo único que hacen es ganarse la vida decentemente”, añadió.

La Prensa habló con dirigentes del sector y le explicaron que al estar cerradas las cuentas bancarias del IATA las agencias de viaje no le pueden pagar los boletos aéreos y no tiene forma de emitirlos.

 ¿Qué es IATA?

Actualmente, IATA agrupa a 320 líneas aéreas, que representan el 85 por ciento del transporte aéreo global y se dedica a apoyar la aviación comercial. Entre sus funciones está la de garantizar que se cumplan diversos estándares y regulaciones. 

Otra de las funciones es emitir los Códigos de Reservas de Aerolíneas que utilizan a nivel mundial las aerolíneas y agencias de viaje para la venta de boletos aéreos. El IATA es como una especie de consolidador de boletos. 

Las agencias de viaje le pagan a IATA los boletos que emiten. En tanto, IATA a su vez paga a las líneas aéreas.

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Avianca fue la primera en reaccionar

De acuerdo con La Prensa, ante el cierre de estas cuentas bancarias del IATA, la primera en reaccionar fue la aerolínea colombiana Avianca que retiró el inventario de boletos y le orientó a las agencias de viajes que mientras se resuelve la situación, garantizan los boletos que les solicitan sus clientes al comprarlo directamente a través de su sitio web. 

Las otras líneas aéreas aún no se han pronunciado, por lo que la venta de sus boletos se mantiene paralizada.

“Tengo entendido que representantes del IATA están buscando cómo hablar con el Gobierno para aclarar la situación, pero todavía no lo han logrado y mientras esto no se resuelva la venta de boletos aéreos podrá seguir paralizada”, confirmó al diario un dirigente del sector turístico.