Ecuador podría celebrar elecciones legislativas y presidenciales anticipadas el 20 de agosto, dijo el jueves la corte electoral, un día después de que el mandatario Guillermo Lasso disolviera por decreto la Asamblea Nacional y adelantara los comicios previstos para el 2025.
Lasso invocó el miércoles la llamada «muerte cruzada» de la Constitución, que permite al presidente convocar elecciones anticipadas tanto para su cargo como para la asamblea bajo ciertas circunstancias, incluso si las acciones de la Legislatura están bloqueando el funcionamiento del Gobierno.
El asediado líder aludió a una grave crisis política y una conmoción interna de Ecuador como razones para tomar la medida, en medio de un juicio político por parte de políticos opositores que lo acusaban de hacer caso omiso a advertencias de una malversación de fondos relacionadas con un contrato en la empresa estatal de transporte de petróleo Flopec.
Automovilista embiste la puerta del Vaticano, los gendarmes abren fuego
Lasso ha negado las acusaciones y ha dicho que el contrato fue firmado antes de que asumiera el cargo en mayo del 2021.
El mandatario permanecerá en el cargo y gobernará por decreto hasta que se elija a su sucesor y una nueva legislatura, de acuerdo con la Constitución de Ecuador.
La presidenta del Consejo Nacional Electoral, Diana Atamaint, dijo al canal local Teleamazonas que la votación se fijaría para el domingo 20 de agosto, según un cronograma preliminar y de conformidad con las leyes locales, y agregó que la fecha debe ser aprobada por el pleno del tribunal.
Si hay una segunda vuelta para elegir presidente, podría celebrarse el 15 de octubre, dijo Atamaint.
Asamblea pide ser restituida por orden constitucional
Los políticos de la oposición esperan que la Corte Constitucional, el máximo tribunal de Ecuador, se pronuncie rápidamente para bloquear la disolución decretada por Lasso, que han calificado de ilegal.
Los legisladores de la Asamblea Nacional disuelta dijeron que respetarán la decisión de la corte, incluso si confirma las acciones del presidente.
«Hay una probabilidad bastante alta de que el decreto sea declarado inconstitucional y que la Asamblea vuelva a sus funciones y vuelva al juicio político (a Lasso)», dijo el político opositor Esteban Torres.
Los elegidos en las elecciones anticipadas solo estarían en sus cargos hasta que se lleven a cabo los comicios regulares en 2025.
El Salvador institucionaliza las escuchas telefónicas a sus ciudadanos
El extitular de la cesada Asamblea, Virgilio Saquicela, explicó el jueves a The Associated Press que presentó una demanda personal ante ese tribunal argumentando que el decreto con el que Lasso disolvió la Asamblea no es congruente ya que no había en el país conmoción social.
Lasso disolvió la Asamblea la víspera cuando ésta tramitaba un juicio político en su contra por presunta malversación de fondos públicos. La decisión se sustentó en un artículo de la constitución que confiere al presidente la potestad de disolver al Legislativo por una sola vez por tres causales: cuando la Asamblea se hubiere arrogado funciones que no le corresponden, por obstrucción al plan nacional de desarrollo o por grave crisis política y conmoción interna.
“Requerimos, demandamos de la Corte Constitucional un pronunciamiento inmediato”, destacó Saquicela, quien pidió al tribunal que se pronuncie en un plazo máximo de dos días. A su vez sostuvo que fueron presentadas otras dos demandas: una del Partido Social Cristiano (PSC) y otra de la fuerza indígena Pachakutik.
Pero el ministro de Gobierno, Henry Cucalón, argumentó en rueda de prensa que el decreto de disolución de la Asamblea queda “a juicio, criterio, discrecionalidad y fundamentación del jefe de Estado” y que no requiere la aprobación de ningún organismo.
Amnistía Internacional reclama a presidente cubano liberación de presos políticos
El abogado y analista electoral Medardo Oleas explicó a AP que cuando se declare abierto el período comicial la máxima autoridad será el Consejo Nacional Electoral y de acuerdo con la norma constitucional “ninguna autoridad podrá interferir en la realización del proceso”. Agregó que si la Corte Constitucional interfiriera con algún dictamen sus integrantes “podrían ser destituidos”.
Lasso, un exbanquero de derecha de 67 años, asumió el poder en mayo de 2021 para un período de cuatro años y desde el inicio de su mandato tuvo que afrontar una fuerte oposición legislativa liderada por una mayoría del partido Unión por la Esperanza, afín al expresidente Rafael Correa (2007-2017).
You must be logged in to post a comment Login