Después de seis días que el Departamento de Justicia de los Estados Unidos ofreciera $15 millones por la cabeza de Maduro tras crear a Venezuela en un narcoestado, las presiones ahora se recrudecen tras un fuerte despliegue naval y aéreo antidrogas en zonas del caribe y pacifico oriental de ese país.
La orden fue dada por Donald Trump y el secretario de Defensa, Mark Esper, para impedir que Venezuela se aproveche de la emergencia mundial y evitar que siga oxigenando su gobierno por el narcotráfico.
«Estados Unidos está lanzando una operación mejorada de lucha contra el narcotráfico en el hemisferio occidental para proteger a los estadounidenses del azote mortal de los narcóticos ilegales», indicó el presidente de EE.UU., Donald Trump, desde la Casa Blanca.
Mark Esper expresó que el fortalecimiento de vigilancia del Caribe y adyacencias se conduce principalmente a detener el aumento del narcotráfico promovido por el gobierno venezolano a través de Nicolás Maduro.
«Enviaremos buques de la Armada, aviones y brigada militar para combatir el narcotráfico en el Caribe», advirtió Esper para detener el narcotráfico en Venezuela.
“Actores corruptos, como el régimen ilegítimo de Maduro en Venezuela, se basan en las ganancias de la venta de drogas para mantener su poder opresivo. El pueblo venezolano está sufriendo muchísimo los narcotraficantes están aumentando sus actividades ilícitas”, señaló el secretario de Defensa.
Agentes de la Agencia de Estados Unidos (DEA) llevan varios años recolectando información de múltiples testigos y evidencias sobre el papel de varios funcionarios y del gabinete de Maduro por colaborar con el Cártel de los Soles, donde los Estados Unidos ha catalogado como un “narcoestado” el gobierno de Nicolás Maduro.
Nicaragua Investiga
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