Los coronavirus son una familia de virus, cuyo nombre se debe a que la forma de sus membranas son similares a una corona.
Este tipo de virus son muy antiguos y suelen vivir en murciélagos y pájaros, pero siete de ellos son transmisibles a humanos, la mayoría causa solo resfriados comunes, pero tres han provocado graves brotes de enfermedades en el mundo, en 2003, en 2012 y ahora en 2020. A las enfermedades provocadas por estos agresivos tipos de virus se les conoce como SARS- Síndrome Respiratorio Agudo y Grave.
Al brote epidémico de este nuevo coronavirus, los científicos le dieron el nombre de SARS-CoV-2.
Más contagioso y más agresivo
El Doctor Jorge Miranda, neumólogo, explica a Nicaragua Investiga que esta cepa de virus es “diez veces más infecciosa y diez veces más patogénica, es decir, causa diez veces más estragos que la influenza, por ejemplo, que es la gripe más fuerte que tenemos cada año”.
Leonel Argüello, epidemiólogo, asegura que el índice de contagio de este nuevo coronavirus es muy alto “tiene la capacidad de que por cada caso puede producir hasta tres casos más”.
La enfermedad ha sido minimizada por algunas personas que la consideran “una gripe común” capaz de desaparecer sin problemas a los pocos días.
Sin embargo, los especialistas advierten que no es el caso, y es por eso que este nuevo cornavirus ha hecho colapsar a los sistemas de salud de los países más desarrollados del mundo, como Estados Unidos, Italia y España.
El neumólogo Jorge Miranda explica que el virus tiene “un receptor donde se une a la célula del epitelio respiratorio”, esto según el especialista causa “una neumonía, de inicio con muy pocos síntomas”.
Pero Miranda advierte que por dentro los pulmones se están llenando de agua e inflamación, y por eso los síntomas aparecen hasta los siete días de haberse infectado.
Incapacidad de atención médica
El 80% de los contagiados podrán superar la enfermedad y mostrarán síntomas leves, dice el doctor Miranda, el 20% tendrán complicaciones graves y de esa cantidad, un 5% necesitarán ser internados en una unidad de cuidados intensivos, “porque desarrollarán una insuficiencia respiratoria, en la que ya no es posible que puedan respirar por ellos mismos”.
El problema es que ese 5% que podrían representar el número de pacientes graves, en números individuales desbordaría al Ministerio de Salud.
“No tenemos la capacidad, el sistema de salud nuestro no está preparado para una catástrofe de ese tipo”, señala Miranda.
Los pacientes que se compliquen al punto de requerir soporte vital estarán a merced de la suerte porque «tenemos un respirador para cada 65 mil personas, eso no da abasto, no tenemos las camas suficientes ni los respiradores suficientes”, advirtió Miranda.
La mejor manera de prevenir este escenario es que la gente se quede en casa entre 7 y 14 días, para bajar la curva de contagios, dice el especialista.
El Minsa y sus cálculos
El protocolo de actuación del Ministerio de Salud filtrado a los medios de comunicación, señala los cálculos de los contagios que podrían darse en el país, unos 32,500 infectados, de los cuales 1,016 entrarán a la unidad de cuidados intensivos requiriendo respiradores artificiales para seguir con vida.
Los cálculos indican que en el país hay poco más de 100 respiradores en todos los hospitales y la mayoría ya está ocupado por pacientes que presentan otras enfermedades.
En Países considerados potencias económicas como Estados Unidos, las autoridades han dicho claramente que no tienen la capacidad para conectar a tantos pacientes complicados por el coronavirus.
Aún así, expertos han advertido que las proyecciones del Ministerio de Salud son demasiado optimistas, si se toma en cuenta que por semanas han omitido los protocolos de prevención para reducir el nivel de contagios en el país, por lo que la necesidad de soporte vital para las víctimas más graves de esta pandemia podría ser mucho mayor.
El doctor Miranda también explica que aunque en China los casos de jóvenes eran muy bajos, en Europa y Latinoamérica el índice de personas menores de 50 años contagiadas aumenta y en la mayoría de los casos requieren hospitalización.
Además de eso, un reciente estudio realizado por investigadores chinos, revela que las personas que se logran recuperar el coronavirus, presentan daño pulmonar permanente.
«La función pulmonar en algunos pacientes podría disminuir entre el 20 y 30% «, indican los investigadores.
Como consecuencia la respiración es superficial, la oxigenación el cuerpo insuficiente y las actividades cotidianas se vuelven difíciles.
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