Este sábado 16 de noviembre de 2024, Sheynnis Palacios entrega su corona como Miss Universo 2023 en la edición número 73 del certamen internacional que será realizado en Ciudad de México, poniendo fin a un reinado que ha marcado la historia de Nicaragua y de Centroamérica.
Después de este día, Palacios quedará libre de los compromisos y protocolos como representante de la belleza femenina internacional, título que le abrió las puertas en diferentes países del mundo donde fue recibida con honores, excepto en su país natal Nicaragua.
Sheynnis Palacios, la Miss Universo con un reinado bajo la sombra de la represión y la censura
La joven de 24 años, quien conquistó el certamen el 18 de noviembre de 2023 en El Salvador, ha sido la primera mujer nicaragüense y de la región en obtener ese prestigioso título.
Durante su reinado, Palacios ha sido una figura destacada en los medios internacionales, especialmente en programas de televisión de Telemundo, donde se le ha vinculado a un contrato de trabajo por 250 mil dólares anuales como presentadora.
¿La veremos en Telemundo?
Según el medio salvadoreño El Mundo, fuentes de la cadena aseguraron extraoficialmente que este contrato comenzará a partir de su despedida del certamen.
Hasta el momento, ni Sheynnis ni la cadena Telemundo han confirmado estos rumores que ya han trascendido en diferentes medios internacionales.
Lo cierto es que este viernes 15 de noviembre de 2024, el medio español ABC publicó que la reina de belleza les dijo en una entrevista exclusiva que lo primero que hará es «bailar en la fiesta que tendrá lugar esa noche. Y después descansar y compartir tiempo con mis seres queridos».
Además, Palacios reveló que, aunque su reinado llegue a su fin, sus proyectos personales y profesionales no se detendrán.
«Me caracterizo por ser una mujer que siempre tiene nuevas metas», comentó. En ese sentido, adelantó que continuará con sus planes de colaborar con marcas internacionales, así como seguir desarrollando su carrera como licenciada en comunicación.
También mostró su interés por explorar nuevas facetas en el mundo del entretenimiento, específicamente en la interpretación, un campo al que está decidida a incursionar.
“La experiencia de Miss Universo 2023 me ha hecho seguir creyendo en mí y en la capacidad que tengo para enfrentar nuevos desafíos”, afirmó Palacios, quien se visualiza como una mujer emprendedora y determinada para continuar con nuevas metas en su carrera.
Sheynnis estará en la mira internacional
Tras entregar la corona este sábado, los ojos estarán puestos en cómo Sheynnis utilizará su visibilidad y su voz en los próximos años.
Su historia no solo es la de una reina de belleza, sino la de una mujer que, sin hacer ruido, ha sido un faro de esperanza para muchos que luchan por un futuro mejor en Nicaragua.
A medida que Sheynnis Palacios se adentra en su nueva etapa profesional, muchos nicaragüenses esperan que, tras finalizar su reinado, la joven se anime a compartir sus experiencias y a hablar más abiertamente sobre la realidad política que ha condicionado su historia como Miss Universo 2023.
Desde el inicio de su reinado, su historia se entrelazó con la de un país marcado por la represión del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, responsables de haber empañado el año más glorioso para ella y para muchos nicaragüenses que se enorgullecieron con su triunfo.
Aunque Palacios ha evitado pronunciarse abiertamente sobre la situación política en Nicaragua, su imagen se ha convertido en un símbolo de resistencia silenciosa, no solo por su victoria, sino también por las circunstancias que han rodeado su vida al pasar de ser una sencilla joven que vendía buñuelos en Managua a una figura de la belleza internacional.
Sheynnis no fue recibida en Nicaragua, pero sí en diferentes países del mundo
La situación política y la represión que vive el país impidieron su regreso, y en su lugar, celebró su victoria en varios escenarios internacionales.
Su reinado, entonces, se convirtió en un reflejo de la difícil situación que atraviesa Nicaragua, sin que Palacios se haya comprometido explícitamente con la oposición ni haya hablado de manera directa sobre la coyuntura política.
El hecho de que una joven nicaragüense haya alcanzado la más alta distinción en el certamen de belleza más importante del mundo, mientras su país vive una crisis sociopolítica, la convirtió en un emblema de lucha silenciosa ante la adversidad generada por la dictadura.
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