La orden del régimen de Daniel Ortega fue tajante: desprestigiar al obispo de la Diócesis de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, para justificar un proceso penal en su contra.
Este pasado fin de semana, mientras el periodista matagalpino Eduardo Montenegro se encontraba en su casa de habitación, recibió una llamada de un emisario oficialista a través de la cual le “pidieron un favor”. El funcionario fue directo y le explicó que necesitaban que “hablara cosas malas de Álvarez”. El comunicador se negó, por lo que decidió huir del país temiendo ser alcanzado por los tentáculos del régimen de Nicaragua. Ahora se encuentra exiliado en Estados Unidos.
“Esta persona me pidió que consiguiera videos (de Monseñor Álvarez), y le respondí que no tenía nada, que lo único que tenía eran las homilías de monseñor, que son públicas, y de los sacerdotes, lo que tenía era cuando ellos llegaron a auxiliar a los chavalos durante la quema del comisariato en un enfrentamiento con la Policía en 2018 (en Matagalpa)”, afirmó Montenegro.
Periodista Eduardo Montenegro. Foto: Voces en Libertad.
Enfatizó, que en la ciudad de Matagalpa hay cuatro personas, de reconocido prestigio en ese departamento, que igualmente están siendo presionadas por la dictadura orteguista para que desprestigien públicamente a monseñor Álvarez, y que el régimen está desesperado por fabricar algún tipo de montaje al jerarca.
“El obispo es mi amigo…, yo soy fundador de TV Merced y con eso te digo todo, incluso aporté con algunos equipos”, añadió.
No podía prestarse a eso contra el obispo
Aseguró que no podía prestarse a la petición sandinista y exponer a Monseñor Álvarez a una condena a través de un falso testimonio contra él y varias de las personas que están encerradas desde hace dos semanas en la Curia Arzobispal de ese departamento.
Montenegro ha estado viajando constantemente desde 2018 para salvaguardar su integridad y la de su familia, pero asegura que ese trajín de ida y regreso de Nicaragua a los Estados Unidos “ha sido cansado y traumático” y que ha perdido la esperanza que el régimen orteguista cambie su actitud represiva en contra de los que opinan diferente a ellos.
Más periodistas exiliados por amenazas
Por su parte, el doctor Pablo Cuevas, director de la Defensoría Nicaragüense de Derechos Humanos establecida en Miami, manifestó que su oficina ha documentado en solo una semana tres denuncias de igual número de periodistas que se han ido al exilio producto de persecución política. Dos de ellos han pedido no hacer públicos sus casos, por temor a represalias contra sus familiares en Nicaragua.
“Hoy (miércoles) me llamó el periodista de Matagalpa, Eduardo Montenegro, propietario del medio de Comunicación Notimatv, y me explicó que se vino al exilio producto que las autoridades políticas y militares de Nicaragua, estaban tratando de obligarlo a que fuera parte de la campaña de desprestigio de los medios oficialistas en contra de Monseñor Rolando Álvarez. Entonces básicamente esa es la denuncia”, indicó Cuevas.
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Este mes de agosto, el régimen Ortega-Murillo ha dirigido ataques sistemáticos en contra de medios de comunicación locales, y de la iglesia católica, especialmente, contra el obispo Monseñor Rolando Álvarez, una de las voces más críticas dentro de la Conferencia Episcopal, y también uno de los obispos de mayor simpatía y respaldo popular.
Monseñor Álvarez se encuentra prácticamente bajo el régimen de casa por cárcel desde inicios de agosto, luego que la Policía publicó un comunicado en el que indica que el religioso se encuentra bajo investigaciones por supuestamente “incitar al odio”, así como “provocar un ambiente de zozobra y desorden” en la ciudad de Matagalpa.
Nicaragua Investiga
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