El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ejecutó este jueves la cancelación masiva de autorizaciones de empleo para beneficiarios del programa de parole humanitario CHNV, afectando directamente a ciudadanos de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela que ingresaron al territorio estadounidense bajo esta modalidad migratoria.
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La medida representa la culminación de un proceso iniciado en marzo pasado por la administración Trump, que busca desmantelar por completo el mecanismo implementado durante el gobierno de Joe Biden para permitir el ingreso ordenado de migrantes desde estos cuatro países en crisis.
Tricia McLaughlin, secretaria adjunta del DHS, aseguro que vamos a «poner n a los programas de permiso humanitario, así como a los permisos de quienes se beneficiaron indebidamente de ellos, será un regreso necesario a políticas de sentido común, a la seguridad pública y a la prioridad de Estados Unidos».
Medio millón de personas en situación de vulnerabilidad
Las notificaciones oficiales comenzaron a enviarse en las primeras horas del día, informando a aproximadamente 530,000 personas que sus documentos de autorización de empleo quedarán sin efecto de manera inmediata. Esta decisión convierte automáticamente a estos trabajadores en indocumentados dentro del territorio estadounidense.
El programa CHNV había permitido a estos migrantes obtener permisos de residencia y trabajo temporal por períodos de dos años, siempre que contaran con un patrocinador financiero en Estados Unidos y cumplieran con rigurosos controles de seguridad.
Cronología de una eliminación anunciada
La cancelación del parole humanitario no constituye una sorpresa. En marzo de 2025, el DHS había establecido el 24 de abril como fecha límite para que los beneficiarios regularizaran su situación migratoria o abandonaran voluntariamente el país.
Sin embargo, una orden judicial emitida por un tribunal federal de Massachusetts en abril había suspendido temporalmente parte del proceso de terminación, generando incertidumbre sobre el destino final del programa.
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La decisión judicial fue posteriormente revertida por la Corte Suprema a finales de mayo, allanando el camino para la implementación definitiva de la medida que ahora se materializa.
Impacto selectivo en programas migratorios
Una característica particular de esta decisión gubernamental es su aplicación diferenciada. La decisión del DHS solo cancela los permisos de los países latinoamericanos, por lo que los otros beneficiarios aún mantienen sus estatus bajo otros programas de parole humanitario, incluyendo ucranianos y casos de reunificación familiar.
Esta selectividad evidencia un enfoque geopolítico específico en las políticas migratorias de la actual administración, concentrando las restricciones principalmente en flujos migratorios hemisféricos.
Alternativas limitadas para regularización
Los migrantes afectados enfrentan opciones reducidas para mantener su estatus legal. Pueden solicitar asilo político, Estatus de Protección Temporal (TPS) donde esté disponible, o buscar otros mecanismos de regularización migratoria.
No obstante, el procesamiento de estas solicitudes requiere tiempo considerable, mientras que la pérdida inmediata de autorización laboral coloca a estas familias en una situación de precariedad económica inmediata.
Consecuencias para la fuerza laboral
La revocación masiva de permisos de trabajo impactará sectores económicos que han dependido significativamente de esta mano de obra, particularmente en industrias como construcción, servicios, hospitalidad y cuidado personal.
Organizaciones empresariales han expresado preocupación por la pérdida súbita de trabajadores calificados y la disrupción que esto provocará en cadenas productivas ya establecidas.
Respuesta de organizaciones defensoras
Un grupo integrado por tres organizaciones que defienden los derechos de los inmigrantes demandó este jueves la cancelación del parole humanitario de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela bajo el argumento que viola el debido proceso migratorio y genera deportaciones expeditas sin garantías procesales adecuadas.
Estas organizaciones argumentan que la medida gubernamental viola principios constitucionales fundamentales al negar audiencias individualizadas ante jueces de inmigración.
Contexto regional y perspectivas
La eliminación del parole humanitario CHNV se enmarca dentro de una política migratoria más amplia que busca reducir significativamente los flujos migratorios legales desde América Latina y el Caribe.
Esta medida podría intensificar la migración irregular, ya que las condiciones que originalmente motivaron el éxodo desde estos países —crisis políticas, económicas y humanitarias— permanecen inalteradas.
La decisión consolida un cambio paradigmático en el enfoque migratorio estadounidense, priorizando la restricción sobre la gestión ordenada de flujos migratorios regionales, con consecuencias que se extenderán mucho más allá de las fronteras nacionales.
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