Mercedes Delgado lleva más de cincuenta años celebrando a la Virgen María, erigiendo altares en las afueras de su casa cuando la imagen de la Inmaculada Concepción de María visita la calle del barrio Cuiscoma en Granada.
Esta tradición la heredó de sus padres y espera mantenerla hasta su muerte, para luego heredarla al resto de su familia. Es así como ella y todos los granadinos marianos, celebran esta tradición decembrina.
Con mucho fervor y como todos los años, este 2022, la Diócesis de Granada celebra los 301 años de la llegada a esta ciudad de la imagen de la Concepción de María o “Conchita”, como la conocen de manera popular los fieles católicos de esta ciudad.
“Esta hermosa tradición la heredamos de nuestros abuelos y padres, hoy seguimos cantando y rezando a la madre de Cristo con gran devoción acompañado de nuestras familias y vecinos, donde luego repartimos el brindis, dando a los asistentes refresco, caña, limones dulces y cajetas”, menciona la devota.
La llegada de la imagen
Según la tradición oral, transmitida por generaciones y recopilada por historiadores, la imagen apareció en 1721 en las aguas del Gran Lago de Nicaragua, flotando en una caja de madera, que fue vista por mujeres que estaban lavando al final de la costa de la calle La Calzada.
“Esas mujeres quisieron tomar la caja de madera, pero al acercarse vieron que se alejaba, en ese momento se asustaron y decidieron avisar a los frailes Franciscanos del hallazgo, quienes al llegar al lugar abrieron el cofre y se encontraron con la imagen preciosa de la Concepción de María que se mantiene hasta hoy en el altar mayor de la catedral», relata el arquitecto e historiador granadino, Fernando López Gutiérrez.
En el 2019 se realizó una visita con la réplica de la imagen a las diferentes parroquias de la Diócesis que también comprende los departamentos de Rivas y Boaco. Al siguiente año, se programó una peregrinación de los fieles a la catedral que se vio interrumpida por la pandemia del Covid-19, para evitar las aglomeraciones, detalló el padre Winder Morales, vicario responsable de la Catedral de Granada.
Celebración en calma
Cabe mencionar que este año, las misas y novenario de La Purísima, a diferencia de otros departamentos, no han sufrido asedio por parte de la policía del régimen. Puede ser el hecho de que esta diócesis, solamente se ha pronunciado una sola vez en redes sociales por la integridad de sus dos sacerdotes arrestados.
Caso contrario de Masaya y Matagalpa en donde hay órdenes expresas de la Policía Nacional de no permitir que la feligresía acompañe a sus imágenes en procesiones en las calles.
Para hoy, se espera mucha solemnidad en una eucaristía presidida por el obispo de la Diócesis de Granada Monseñor Jorge Solórzano junto al clero y el pueblo devoto de la imagen patrona de la Diócesis.
Granada se paraliza
La celebración de la tradicional Gritería, es muy diferente en Granada al resto del departamento del país. Los católicos no acostumbran a salir en grupos a las calles en busca de altares para cantarle a la virgen, esperando luego la gorra cargada de dulces, limones, cañas, matracas y pitos.
La veneración a la virgen María se realiza durante los días del novenario que inician el 28 de noviembre, donde la imagen de la Concepción sale de la catedral a recorrer las nueve principales calles de la ciudad; como la Calzada, Santa Lucia, Calle Atravesada, El Arsenal, Palmira entre otras. Aquí las familias católicas elaboran bellos altares que adornan con flores de pascuas, pastores y coloridas luces así como velas que simbolizan cada una de las plegarias que hacen los fieles devotos.
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Muy afanada encontramos a Adela Patricia Ubau, elaborando su altar con la ayuda de sus hijas, quienes colocaron una cortina blanca de retablo en la pared y sacaron de su jardín las plantas, con las cuales adornaron la imágen para rezar la novena en familia y acompañado de vecinos, quienes posteriormente degustaron de unos deliciosos nacatamales.
“Todos los años, nosotros elaboramos este altar a la Virgen con gran devoción, pero estamos claros que el mayor altar que ella espera es el del alma, para seguir los pasos de Cristo”, precisó Adela.
Celebraciones únicas
Don Guadalupe Lacayo dijo que ha participado en otras ciudades en la celebración del 7 de diciembre, pero valora que en Granada se celebran con gran devoción y respeto a la Virgen, por eso las cataloga, como únicas, porque el pueblo acude a los rezos del Rosario a la catedral y es una solemnidad, cuando la imagen recorre las 9 principales calles de la ciudad, donde el pueblo mariano se desborda a la veneración.
El origen de la diferencia
El arquitecto e historiador granadino, Fernando Gutiérrez, sostiene que las rivalidades históricas que mantuvieron las ciudades coloniales de León y Granada por disputa de mantener la capital incidió en que los granadinos realizaran una tradición diferente, para celebrar las festividades a la Inmaculada Concepción de María, centrada en los ocho días del novenario en cada avenida de la Ciudad Colonial.
Otra de las particularidades de las celebraciones marianas en Granada en la festividad del 8 de diciembre, es que las familias granadinas rezan el novenario en su casa con invitaciones privadas a sus vecinos y amigos, “si no estás dentro de la lista de invitados no te podés colar”, advierte el historiador.
“Yo me imagino que hace 300 años, cuando se empezó hacer esta celebración en Granada se quiso hacer distinta a como se hacía en la capital que era en ese tiempo León, es así que las festividades a la Inmaculada se dan durante 9 días en la Ciudad Colonial”, rememora el historiador Fernando López Gutiérrez.
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