Sacerdote panameño es expulsado de Nicaragua por mencionar a monseñor Álvarez

Con solo la mudada que andaba puesta, así fue expulsado de Nicaragua hacia Honduras por la dictadura Ortega Murillo, el sacerdote panameño Donaciano Alarcón Valdés, después que ofició la misa crismal del Domingo de Ramos en la parroquia María Auxiliadora del municipio de San José de Cusmapa, Madriz, perteneciente a la Diócesis de Estelí, de la cual monseñor Rolando Álvarez es el administrador apostólico.

Y es que todo hace indicar que agentes paraestatales están infiltrados dentro de la grey católica de Nicaragua, pues se maneja que mencionar el nombre del obispo Álvarez durante su homilía, fue el motivo por el cual expulsaron al padre Alarcón.

Según testigos del hecho, los policías solo esperaron que terminara la misa, cuando abordaron al religioso y se lo llevaron para expulsarlo del país. El religioso no tuvo tiempo de recoger sus pertenencias personales en la casa cural del municipio.

Resolución de la ONU es un aliento para las víctimas del régimen sandinista

El sacerdote panameño quien fue conducido hasta la frontera El Espino y dejado en suelo hondureño, había llegado a Nicaragua como misionero y estaba a cargo de la administración de dicha parroquia.

El obispo de la Diócesis de Danlí en Honduras, monseñor José Antonio Canales, quien ha seguido el tema de la persecución contra la iglesia católica de Nicaragua por parte de la dictadura sandinista, afirmó que la expulsión de este sacerdote no le sorprende porque si expulsa a sacerdotes nacionales, la escala contra los religiosos no nicaragüenses es igual.

“Esto es una confirmación más de la intolerancia de las medidas propias de un régimen que olvidó hace tiempo que Nicaragua es firmante de la Declaración Universal de los derechos humanos donde se protege la libertad de credo, de religión. No me sorprende porque todavía ha sido más drástica la tiranía nicaragüense”, acentuó Canales.

A pesar que la dictadura Ortega Murillo, presentó recientemente al obispo Rolando Álvarez, donde aparentaba que tenía un «buen trato» durante su reclusorio en el sistema penitenciario La Modelo, al paracer su nombre está vetado en Nicaragua, lo cual ha sido causa de persecución, asedio y expulsión del país de algunos religiosos.