Los diálogos de paz que desarrollan en La Habana las delegaciones del gobierno de Colombia y el ELN están en una «pausa», afirmó el lunes el jefe negociador de esa guerrilla, Pablo Beltrán.
«La mesa está pasando por una pausa, los trabajos que había hoy lunes los suspendimos a la espera de que hubiera la respuesta del gobierno, y quedamos de convocarnos mañana martes para estudiarla», dijo Beltrán en un mensaje divulgado en el canal de YouTube de la delegación de paz del ELN.
El jefe negociador del Ejército de Liberación Nacional (ELN) precisó que las conversaciones entraron en «crisis» luego de que el presidente izquierdista Gustavo Petro dijera el viernes que la economía ilícita es lo que motiva a una parte del ELN.
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Beltrán señaló que esos pronunciamientos contradicen el estatuto político que el gobierno da al grupo guerrillero. «Si viene el presidente y dice a los generales que somos un grupo no político, que somos como el Clan del Golfo», un cartel del narcotráfico, las conversaciones «se van al traste», añadió.
El jefe guerrillero destacó que «de acuerdo al estudio que se haga de las posiciones» de cada parte, el martes «se reactivaría la mesa» de negociaciones, que las delegaciones del gobierno y del ELN iniciaron en la capital cubana el 2 de mayo.
Durante el fin de semana el ELN había pedido al gobierno definir si consideraba que el diálogo para alcanzar la paz en Colombia es «un proceso político serio».
En un comunicado publicado este lunes en respuesta, el gobierno dejó claro que «reconoce la existencia de negociaciones y diálogos de carácter político» con el ELN, al que instó «a seguir avanzando» para alcanzar «un cese de hostilidades entre todas las partes del conflicto».
«Esperamos que la respuesta del Ejército de Liberación Nacional (ELN) sea consecuente con esta invitación y este llamado», apuntó.
En su mensaje, Beltrán destacó que «ha habido algunas declaraciones públicas que ayudan a superar algunos malentendidos, pero que (…) lo que motivó el reclamo» del ELN «sigue latente para evaluarse».
Petro impulsó en 2022 la negociación de paz, cuyas conversaciones se iniciaron en noviembre en Caracas y continuaron en marzo en Ciudad de México.
El gobierno espera llegar a un acuerdo de cese al fuego con el ELN antes de las elecciones regionales de octubre en Colombia, según Otty Patiño, negociador del gobierno.
Desangrado por más de medio siglo de conflicto armado, Colombia ha intentado numerosas negociaciones de paz con los grupos armados, muchas de ellas fallidas. En 2016 un histórico pacto desarmó a la poderosa guerrilla de las FARC y la transformó en partido político.
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