Durante varias semanas, la ciudad de Matagalpa viene sufriendo días enteros de altas temperaturas que han rozado incluso hasta los 35 grados centígrados en pleno medio día y 33 grados por las noches.
Y según los últimos pronósticos climáticos, tanto del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales, Ineter, como del Observatorio de Fenómenos Naturales, Ofena, este fenómeno continuará por muchos días más.
Las temperaturas máximas diarias oscilan entre los 28 y los 33 grados, con algunos días en que se registraron temperaturas mínimas de 25 grados, según informó Ineter, lo cual coincide con lo informado por Ofena.
No obstante, en el mes de abril, las temperaturas en Matagalpa generalmente variaron de 22 a 31 grados, contrarias a las de enero en que el frío gobernó el clima, oscilando las temperaturas entre 16 y 22 grados.
En este momento Matagalpa vive una especie de “golpe de calor” al que la ciudadanía de esta zona no está adaptada en lo general, según un médico que pidió hacer sus comentarios bajo identidad reservada. El especialista advirtió que estas altas temperaturas, pueden ocasionar colapsos en la salud de las personas.
“Nos enteramos de una ciudadana de la tercera edad que estaba haciendo fila en la calle para entrar a una institución pública y de repente se sintió mal, se desmayó y, aunque trataron de auxiliarla, murió dentro del edificio gubernamental. Es decir, producto de estos calores nos podemos morir de repente”, advirtió el galeno.
Falta comunicación
Informó que en Nicaragua, “no existe una política de gobierno encaminada a combatir las olas de calor, no hay una estrategia de comunicación que permita que los ciudadanos en el campo y la ciudad sepan qué ocurre, cómo evitar problemas derivados de eso y donde acudir en caso de ser necesario”.
El experto explicó que “lo que vivimos es un golpe de calor, es una de las consecuencias de las altas temperaturas, es un trastorno ocasionado por el exceso de calor en el cuerpo, generalmente como consecuencia de la exposición prolongada a las altas temperaturas”.
“Para prevenir este ambiente árido y caliente, debes usar gorra, sombrero y sombría. Consumir alimentos frescos, beber líquidos, usar ropa de colores y mangas largas. Evitar estar por mucho tiempo en el sol, no permanecer en los automóviles estacionados y cerrados entre las once y cuatro de la tarde, entre otras medidas similares”, compartió el experto.
De remate, falta agua
Mientras tanto, además de los calores intensos que se viven en Matagalpa, también se sufre por falta de agua potable en los más de 200 barrios que conforman esta cabecera departamental.
En el mejor de los casos, el agua llega a los hogares solo por un par de horas, día de por medio y en horarios en que las familias están dormidas o todos sus integrantes están en sus trabajos.
“Yo me voy a las 6:30 de la mañana para el trabajo todos los días; el agua, cuando viene, cae a las ocho y en la casa no queda nadie para agarrar agua. En la noche ya no hay nada y los recibos son puntuales”, se queja doña Johana Cruz, habitante del barrio sor María Romero.
La falta de agua potable y los fuertes calores agravan la situación de salud en “la perla del septentrión”, estos días en que las lluvias de la temporada son esperadas más que “como agua de mayo”, como oportunidad para no morir de sed.
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