La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo celebra este lunes 29 de enero el inicio del año escolar 2024 alegando que, después de semanas de trabajo, todo está listo para que los niños y adolescentes vuelvan a las aulas en los colegios públicos del país.
“Estamos mañana ya instalando los festejos que nos llevan al lunes, cuando vamos a estar estrenando aulas, estrenando mochilas, con uniformes bonitos, limpios, planchaditos, y todos acogiendo las aulas, a clases bendecidos y victoriosos”, dijo Murillo el viernes pasado.
Según la página web del Ministerio de Educación (Mined), en todo el país son alrededor de 60 mil docentes los que se estuvieron capacitando en las últimas semanas para recibir a más de un millones de estudiantes en todas las modalidades en los centros de estudios públicos. El Mined aseguró este lunes que son exactamente 1.8 millones de estudiantes los que están iniciando clases.
Sin embargo, dos expertos en educación dijeron a Nicaragua Investiga, bajo anonimato por temor a represalias, que solo se trata de otro inicio de año escolar con una calidad de educación que «va hacia abajo».
Año escolar 2023 inicia con los mismos problemas educatios de siempre
No se asegura el aprendizaje
Uno de los expertos mencionó que, desde el año pasado, la dictadura dio la orden a todos los maestros de que aprobaran a todos los estudiantes de primaria y secundaria «supieran o no supieran».
«Con la política de ellos (Ortega Murillo), de orientar a todos los maestros a que pasaran a los niños y niñas, y a los jóvenes, independientemente de que supieran o no, vamos cada día más peor con la calidad educativa y encima con universidades destruidas totalmente», mencionó el especialista.
Se quejó de que en la actualidad no se puede determinar con certeza el nivel de educación pública que existe en el país debido a que no existen investigaciones que lo certifiquen y los datos que ofrece el régimen «no son creíbles».
«El que hable, o el investigador que indague sobre la calidad de la educación en Nicaragua, va al Chipote», expuso.
El otro entendido en la materia manifestó que en primaria y secundaria no se están asegurando los aprendizajes.
«Nadie sabe si en realidad los niños están aprendiendo o no, porque hay una orientación de pasarlos independientemente de que sepan».
Docentes con debilidades
Este último especialista agregó que el otro gran problema en la educación pública es que los profesores tienen serias debilidades «y las debilidades de un maestro se trasladan a los estudiantes».
Un maestro que no sabe leer bien, comprensivamente, no sabe enseñar comprensivamente. Un maestro que no sabe matemáticas no sabe enseñar matemáticas», indicó, agregando que se conoce porque ni siquiera tienen buena ortografía.
Universidades también
Añadió que es lamentable la situación para la educación en todo el país porque a estos mismos estudiantes, que ahora están recibiendo una pésima educación, les espera universidades también con una enseñanza deficiente.
«No hay exámenes de admisión en las universidades. Lo que le espera a cualquier muchacho con ese título es que nadie confíe en la formación que va a tener», lamentó.
No les interesa la educación
Ambos expertos coincidieron en que a los dictadores Ortega Murillo no les interesa que los nicaragüenses se eduquen, sino que procuran que haya ignorancia entre la población.
«Ellos no quieren ciudadanos sino clientes. Por tanto, todo lo que han hecho es una educación de pésima calidad, pésimos maestros, pasar a todo el mundo independientemente de los aprendizajes que tengan, cerrar las buenas universidades. Eso es lo que vamos a tener», finalizó diciendo uno de los especialistas.
Nicaragua Investiga
