La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo está involucrando más a Rusia y a China en las actividades de los cuerpos de seguridad. Recientemente, en las actividades por la fundación del temido Ministerio del Interior (Mint), tristemente célebre por la persecución en los años ochenta y por sus crímenes, participaron altos funcionarios de esos dos países, rivales eternos de Estados Unidos, el principal socio comercial de Nicaragua, a donde van las exportaciones y de donde llegan las remesas.
El dictador Daniel Ortega, su consuegro y jefe de la Policía, Francisco Díaz, y la titular del Mint, Amelia Coronel, se explayaron en elogios a Liu Guozhou, vicegobernador y director de Seguridad Pública de la Provincia de Guangdong, China, y al embajador de ese país en Nicaragua, Chen Xi.
Los elogios tampoco faltaron para los rusos: Alexander Tsilik, director del Centro de Capacitación que Rusia tiene operando en Managua, y Svetlana Petrova, encargada de negocios de ese país en Managua.El centro ruso ya fue sancionado por Estados Unidos.
Para un experto en seguridad, que pidió anonimato, resaltar a esos funcionarios en un evento sobre el Mint tiene un mensaje claro de la dictadura: “le quieren decir a Estados Unidos y a otros países occidentales que tiene grandes aliados”, precisó.
“Ortega siempre ha creído que interviene en la rueda de la política internacional y por eso hace esas declaraciones y esa carga verborreica contra Estados Unidos y Europa. Quiere mostrarse como un gran aliado de esas dos potencias”, opina el experto.
Pero también, asegura, es un mensaje a la disidencia interna: “les está diciendo que, con la ayuda de esos países, puede vigilarlos, sobre todo ahora que se ha mencionado que con tecnología rusa pueden tener acceso a las comunicaciones privadas”.
Recientemente, una investigación del experto en seguridad nacional de Estados Unidos, Douglas Farah, advirtió que Rusia tiene operando en Managua un centro con tecnología capaz de interceptar comunicaciones.
Los centros de espionajes rusos en Nicaragua, expuestos en investigación de la FIU
El experto en seguridad opina que Ortega quiere mandar el mensaje de que, si lo quieren castigar o seguir aislando, él tiene amigos poderosos. Sin embargo, agrega que también puede ser contraproducente, debido al estancamiento de Rusia en Ucrania.
El Ministerio del Interior estaba bajo el mando de Tomás Borge en los años ochenta y controlaba a la Policía, la Seguridad del Estado y el Sistema Penitenciario.Es tristemente recordado por la persecución a opositores, ejecuciones extrajudiciales, entre otros delitos que siguen en la impunidad.