Autoridades fronterizas de Panamá retuvieron y enviaron ante un juez de paz este lunes al menos treinta nicaragüenses que presuntamente bloquearon la frontera con Costa Rica en Paso Canoas, lado panameño con la frontera costarricense.
Los nicaragüenses fueron retenidos tras protestar porque no pueden continuar su viaje y por quejarse por el bloqueo que se le impidió a más de 90 nicaragüenses procedentes de Panamá el fin de semana pasado.
«Lo que nosotros queremos es regresar a nuestros hogares, es lo único que queremos porque ya entramos en la desesperación, aquí no tenemos nada y no tenemos cómo sobrevivir en este país», expresó en Paso Canoas a la cadena panameña TVN la nicaragüense Glenda López.
El subcomisionado del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), Jorge Govea, explicó que los nicaragüenses fueron retenidos y llevados ante un juez de paz por las «faltas administrativas» que cometieron al bloquear una vía internacional y poner en riegos tránsito de carga.
Jorge Govea aseguró que se trató de un procedimiento de despeje de vías «ordenado» y sin incidentes, dijo a la televisión local.
«Que Nicaragua nos dé la luz verde»
El viceministro de Seguridad Pública de Costa Rica, Eduardo Solano, detalló que este 29 de junio llegaron unos 46 nicaragüenses a la frontera para ingresar a suelo costarricense, pero se les negó el paso.
«Ellos hoy por voluntad propia tratan de ingresar a la fuerza a territorio costarricense y nosotros estamos acá desplegando a fuerza pública para evitar el ingreso (…) Hasta que Nicaragua garantice y nos dé la luz verde para el flujo y el ingreso directo a territorio nicaragüense no van a poder estas personas ingresar a Costa Rica y deben esperar en Panamá», destacó Solano.
Más nicaragüenses varados
El gobierno del presidente Daniel Ortega ha accedido a dar respuestas a varios grupos de nicaragüenses por la presión internacional y de la ciudadanía. Sin embargo, no ha brindado un informe oficial de los motivos por el cual bloquea el ingreso de los conciudadanos.
El pasado 29 de junio ingresaron al país 130 nicaragüenses que estuvieron varados en alta mar por más de tres meses y pedían al gobierno de Nicaragua una respuesta ante su solicitud.
Pero aún permanecen 160 en condiciones precarias y sin respuestas en la Isla Gran Caimán.
Otros nicaragüenses permanecen en otras compañías sin obtener todavía la luz verde de las autoridades para la repatriación de los demás conpatriotas.
Fotografía de portada tomada de la Voz de América