Una tremenda paliza por oficiales de El Chipote provocó que Dilón Antonio Ramos perdiera su sistema auditivo. Él era estudiante del cuarto año de contaduría pública de la faren de Matagalpa y fue secuestrado el pasado 21 de julio por policías y paramilitares quienes los trasladaron al chipote donde sufrió la agresión para luego encarcelarlo injustamente en la modelo donde comenzó a convulsionar constantemente hasta perder la audición así lo ha denunciado su madre Eymi Ramos.
“Después que fue trasladado al sistema penitenciario comenzó a convulsionar, perdió la audición total de su oído, ya fue condenado a 25 años 6 meses y a pesar que su abogada ha hecho muchos intentos para que el médico forense lo vea no ha sido posible, prácticamente se ha auto medicado, está bastante estable, pero si perdió la audición de su oído” explico la madre de familia.
Dilón forma parte de los 135 presos políticos que padecen de enfermedades crónicas en los sistemas penitenciarios de la cárcel Modelo y La Esperanza en Tipitapa, así como en el chipote donde sus vidas corren peligro por la falta de atención médica y medicamentos.
Entre las enfermedades que padecen estos nicaragüenses a quienes se les ha violado sus derechos están: Problemas de presión, renales, diabetes, epilepsia, hongos y alergias en la piel, estos datos forman parte del último informe que han presentado el comité de presos y presas políticas quienes han denunciado estos atentados contra sus vidas a organismos de derechos humanos e incluso en el encuentro que sostuvieron con los eurodiputados a finales de enero.
Entre los casos más relevante están el de Delmis Portocarrero que presenta lupus, el de Ruth Matute que fue recientemente operada por una enfermedad cardiovascular y posee un marcapasos, Juan Carlos Baquedano quien tiene una bala alojada en el cerebro, el de María Chavarría quien tiene paralizado la mitad de su cuerpo.
Fotografía: el joven Dilón Antonio Ramos. Cortesía/NI
Medina
febrero 1, 2019 at 11:13 pm
JUSTICIA JUSTICIA JUSTICIA. VIVA NICARAGUA.