Un nuevo grupo de 238 nicaragüenses que permanecían varados debido a la pandemia del coronavirus volvió a Nicaragua por el puesto fronterizo de Peñas Blancas. Los conciudadanos venía de procedencia de Panamá, según informó el Ministerio de Gobernación la noche del 13 de noviembre.
Se trata de 146 mujeres y 92 varones, quienes retornaron a sus hogares tras el panorama que ha dejado la pandemia por el cierre de negocios y empresas, debido a las medidas estrictas que han implementado los países para evitar contagios masivos.
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«Cada uno portaba resultado negativo de la prueba RT – PCR en tiempo real para el COVID19, cumpliendo con la resolución ministerial 358-20, emitida por el Ministerio de Salud», señala la nota de prensa del Ministerio de Gobernación.
Por su parte, el Ministerio de Salud «realizó una revisión rigurosa para descartar fiebre o síntomas» respiratorios relacionados al COVID-19, pero no señalan si los nicaragüenses recibieron orientación sobre guardar cuarentena de 14 días en sus domicilios.
Pruebas tienen un costo de 150 dólares
Cabe destacar que dichas pruebas han sido comercializadas por el gobierno de Nicaragua por un costo de 150 dólares, que muchos nicaragüenses no tienen las posibilidad económica para la comprarla.
Sin embargo, el gobierno no ha apoyado a los conciudadanos a realizarse la prueba gratuitamente, sino que tienen que pagar la cantidad estipulada si desean realizárselas de parte de Nicaragua.
Nicaragüenses varados en Panamá relatan dramática situación
Por su parte, el gobierno de Nicaragua ha explicado que solamente extiende permisos de ingresos a quienes presenten un certificado negativo de COVID-19; no tenga síntomas relacionados y demuestren que tienen pagado su transporte desde el país de origen hasta su vivienda.
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