El cuerpo de Jaime Moreno, el segundo de los nicaragüenses que falleció en un tráiler en México, mientras intentaba llegar a Estados Unidos, llegó el pasado sábado a Nicaragua.
El domingo a las ocho de la mañana le realizaron una misa de cuerpo presente y una hora más tarde le brindaron cristiana sepultura rodeado de sus amigos, familiares y seres queridos que se dieron cita en el Cementerio Los Angelitos, Ojo de Agua, Chinandega para darle el último adiós.
Ataúd de Jaime Moreno durante su vela. FOTO: Cortesía
Sin embargo, la tragedia de Moreno no terminó al momento de su deceso. Días después de ser notificados sobre su muerte, los familiares recibieron comunicaciones extrañas por personas que querían hacerse pasar por representantes de migración exigiéndoles 560 dólares para poder repatriar el cuerpo, pero el Instituto Nacional de Migración de México había dicho que ellos asumirían los gastos de estas repatriaciones, entre la que también se incluye el cuerpo de Clorinda Alarcón nicaragüense de 20 años, que falleció en el mismo incidente con 33 semanas de embarazo.
Amenazaron con no entregar cuerpo
Cuando el cuerpo llegó a Nicaragua, familiares de Moreno denunciaron que agentes de migración nicaragüenses robaron pertenencias de Jaime que habían enviado desde México en el ataúd, y que cuando intentaron reclamar los amenazaron con no entregar el cuerpo.
Fallece, Jaime Moreno, luego de estar hacinado en trailer en México
De acuerdo con los parientes de Jaime Moreno, las autoridades mexicanas enviaron junto a su cuerpo el celular de él, 100 dólares y un bolso tipo canguro que llevaba consigo cuando falleció, pero estos artículos no les fueron entregados.
«En el aeropuerto la Policía no quiso que abrieran el cuerpo y amenazaron con no entregarlo. Y es que se robaron las pertenencias que traían: el celular, su cédula, 100 dólares y el canguro. Queríamos revisar a ver si él era, pero nos amenazaron con no entregarnos el cuerpo y era porque le habían robado las cosas que traía el ahí. Parece que ni los muertos se capean en Nicaragua», expresó un familiar.
Jaime Moreno y Clorinda Alarcón fallecieron la misma semana que otras dos nicaragüenses intentando migrar hacia Estados Unidos, una de ellas era una menor de edad que fue arrastrada por las aguas del Río Bravo.
Días después otro grupo de mujeres nicaragüenses también fueron rescatadas del Río Bravo ya que cuando estaban cruzando tuvieron dificultades debido a la peligrosidad de este cuerpo de agua.
Nicaragua Investiga
You must be logged in to post a comment Login