Samantha Jirón presenta problemas de salud por encierro carcelario

Samantha Jirón, la presa política más joven de Nicaragua, actualmente se encuentra en un estado de estrés carcelario, que le ha desencadenado problemas gástricos e hipertensión a casusa del encierro que ha sido sometida desde que fue detenida en noviembre pasado.

Carolina Jirón, madre de la joven, manifestó que su hija presentó estas complicaciones después del juicio. “Se le elevaba demasiado la presión que hasta la estuvo viendo la doctora del Sistema Penitenciario (La Esperanza)”, explicó.

La historia de Samantha Jirón, la presa política más joven de la dictadura

Su madre considera que el juicio y la sentencia le provocó un estrés profundo que terminó “agobiando” a la joven, pues luego comenzaron los dolores en el estómago, malestares y diarrea.

Samantha fue condenada en marzo de 2022 a ocho años de prisión y treinta mil córdobas de multa bajo cargos de “menoscabo a la integridad nacional” y “propagación de noticias falsas”. El 16 de enero cumplió 22 años, siendo la presa política más joven de la dictadura de Daniel Ortega.

Madre de la joven teme no verla

La madre de la joven declaró que ella ha presentado estrés y dolores de cabeza. “La forma de cómo conseguir trabajo es algo que me pone mal, no por el hecho de trabajar, sino por el hecho que aquí no hay trabajo”, lamentó.

“Yo hablé con ella y le dije que, si consigo un trabajo, no podría seguir viéndola en las visitas. Porque la única que va a las visitas soy yo y su hermana menor. Eso influye en el estado de ánimo de uno”, manifestó.

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Las visitas son cada 21 días. La última vez que la vio fue el pasado 4 de abril. “Ese día me dijo que de la presión estaba un poco mejor”, dijo su madre y recordó que su hija siempre ha sido bien activa, pero el “encierro” le está perjudicando.

Carolina Jirón comentó que le ha aconsejado a su hija que trate de relajarse y tenga paciencia. “Cada 15 días le llevo dos libros que son novelas y de historias; nada relacionado con política porque eso no pasa. Una vez le llevé el libro de Los miserables de Víctor Hugo y no sé por qué no lo permitieron pasar. Me dijeron que ese libro no pasaba”, denunció.