El párroco de la iglesia El Calvario, en Nandaime, Manuel Salvador García, de 56 años, fue detenido este miércoles, según confirmaron familiares del religioso a diversos medios de comunicación.
El sacerdote se encontraría presuntamente en la Dirección de Auxilio Judicial, conocida como El Chipote, en donde estaría siendo investigado tras un incidente ocurrido durante la noche del 30 de mayo.
Según un testigo que prefirió mantenerse bajo el anonimato, el 3o de mayo, el sacerdote estaba dentro de la Iglesia conversando con dos mujeres, presuntas madre e hija, cuando se escucharon gritos. Pobladores salieron alarmados y aseguran que la menor de las mujeres estaba en el portón de la iglesia gritando que su madre había sido agredida.
La Policía habría llegado al lugar para hablar con las mujeres afectadas. Ambas negaron que el padre fuese responsable de haber agredido a la mayor. «Dijeron que había sido un hermano del padre y que ya se había ido» expuso el testigo, quien mencionó que no interpusieron denuncia alguna contra García.
Los medios oficialistas empezaron una campaña divulgando un video del incidente y señalaron al sacerdote de «crear zozobra» en la población.
En un video del medio de propaganda Juventud Presidente, aparecen dos aparentes testigos del hecho y aseguran que supuestamente el sacerdote habría intimidado a la presunta víctima para evitar interponer una denuncia.
«Sale la muchacha diciendo que no iba a poner denuncia. Imagino yo que la amenazó», dijo el ciudadano Lesther Chavarría al medio Juventud Presidente.
Policía busca a sacerdote tras altercado en iglesia de Nandaime
Sacerdote con dolencias
El sacerdote padece de neuropatía diabética y diabetes, motivo por el que sus familiares se encuentran altamente preocupados que se encuentre en las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial o «El Chipote».
«A la feligresía se le informó que va haber un nuevo padre sin dar más detalles porque iba a haber una misa pero no la hicieron. Posteriormente se nombró a otro sacerdote», declaró a Nicaragua Investiga una fuente que prefirió permanecer en el anonimato por temor a represalias.
«No pudimos obtener información de la policía. La Policía Nacional no quiere contestar porque dicen que está bajo investigación y ellos no pueden dar detalles de una investigación», reafirmó.
La detención de García marca un grave precedente en contra de los sacerdotes, los cuales han sido perseguidos por el régimen de Daniel Ortega desde el año 2018.
De hecho el incidente se da a tan solo semanas de conocerse un informe realizado por una comisión legislativa nicaragüense que analizó un combo de leyes aprobadas entre 2020 y 2021, con el fin de endurecerlas.
La comisión aseguró que víctimas de las protestas que estallaron en el país en 2018 “demandaron justicia para con los religiosos y directores de organizaciones de Derechos Humanos”, que el gobierno ha acusado de ser cómplices de la oposición.
Tras conocerse lo que ha sido interpretado como «amenazas de cárcel contra los sacerdotes», el cardenal nicaragüense Leopoldo Brenes, arzobispo de Managua, afirmó que “oraba por quienes los calumniaban”.
“Estamos tranquilos, seguimos orando por quienes nos calumnian. No somos enemigos del gobierno, aportamos lo mejor para bien común que es la misión de la iglesia”, indicó Brenes.
Nicaragua Investiga
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