Diputados de izquierda intentarán entrar a Nicaragua para verificar condiciones de presos políticos

Aunque la propaganda oficialista y algunos gobiernos y organizaciones de la región todavía tienen a Daniel Ortega como un referente histórico de la izquierda, la realidad dista mucho de ello, ya que el gobernante FSLN hasta fue expulsado de la Internacional Socialista y hay incluso una comisión internacional, integrada por diputados de izquierda, dispuestos a buscar cómo entrar a Nicaragua en solidaridad con los presos políticos.

La Comisión está integrada por los argentinos Luciana Echevarría, Alejandrina Barry y Pablo Almeida, del Frente de Izquierda y de Trabajadores Unidad (FIT Unidad); Roberto Robaina, legislador de Río Grande Do Sul de Brasil; y Mariano Rosa, dirigente nacional del Movimiento Social de los Trabajadores – Fuerza de Izquierda de Trabajadores Unidad (MST-FIT Unidad) y de la Liga Internacional Socialista (LIS).

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Entre el 6 al 13 de julio estarán Costa Rica, y el día 8 acompañarán una caravana de movimientos sociales e intelectuales, que bajo el lema “No somos indiferente. Nicaragua nos convoca” viajarán desde San José hasta la frontera de Peñas Blancas pidiendole a las autoridades sandinistas ingresar al país y así verificar las condiciones en que se encuentran los opositores encarcelados.

Durante su estadía en Costa Rica, la comisión se entrevistará con familiares de presos políticos.

“Hay hoy en Nicaragua más de 180 presos y presas políticos principalmente producto de haberse movilizado durante las protestas de 2018 que fueron duramente reprimidas por el gobierno de Ortega. Algunos de ellos han recibido condenas durísimas de más de 10 años de prisión solo por el hecho de haber enfrentado políticas de ajuste a la medida del Fondo Monetario», dijo la Alejandrina Barry, según un reporte del Laizquierdadiario.

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La Comisión Internacional asegura que Ortega maneja un falso discurso antiimperialista y de izquierda. «Nicaragua es hoy un país capitalista en todos sus términos y con las tasas de pobreza más altas del continente. La Rebelión de Abril, fue un punto de inflexión ante ese cuadro general”, denunció.