El joven nicaragüense Carlos Marconis Anton Catin fue baleado y luego quemado en una localidad llamada Chahuites del estado mexicano de Oaxaca. Así lo dio a conocer la organización humanitaria Texas Nicaraguan Community a través de sus redes sociales.
“Desde el día sábado 5 de Noviembre, salió de donde vivía a ganarse algo de dinero vendiendo en las calles pan y café, para continuar su viaje y ya no regresó”, informó la organización Texas Nicaraguan Community en su cuenta de Facebook.
La familia de Carlos Anton Catin, expuso a la organización humanitaria que el joven “viajaba hacia Estados Unidos para darle una mejor vida a sus hijos”, pero en su travesía “le dispararon y lo quemaron”.
Reconocido por los tatuajes
Según reportó Texas Nicaraguan Community, el cuerpo del joven fue levantado por una funeraria y para dar con el rastro de su familia, expusieron los tatuajes que este tenía en su cuerpo.
Fue gracias a los tatuajes que Carlos tenía en su cuerpo, que sus familiares lo pudieron reconocer y ahora están en proceso de repatriación del cuerpo del joven.
Las cifras de migrantes nicaragüenses que fallecen en su trayecto hacia Estados Unidos, siguen en aumento. Son muchos los que han perecido ahogados en el río Bravo, otros en accidentes de tránsito en México, o bien son asesinados.
Cosep quedará fuera de la Comisión Nacional de Zonas Francas
164,600 nicaragüenses han sido detenidos en EE.UU.
Son miles los nicaragüenses que huyen del régimen dictatorial de Daniel Ortega que reprime y mantiene inmerso al país en una situación de pobreza y desesperanza, lo que obliga a que la población migre hacia otros países, especialmente a Estados Unidos en busca de mejores oportunidades.
Datos de la patrulla fronteriza de Estados Unidos (CBP) indican que en el año fiscal 2022 detuvieron en la frontera a 164.600 nicaragüenses sin papeles, un dato tres veces mayor que en el período anterior.
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