El precio de la libra de frijoles ronda los 35 córdobas en los mercados de Nicaragua, de acuerdo a los monitoreos realizados por la Consultoría del Gestor al Consumidor (CGC). Los altos precios contrastan con el aumento de 7 por ciento que hubo en la cosecha de primera, según los datos proporcionados por el presidente del Banco Central.
En las últimas semanas el precio de la libra de frijoles pasó de costar 25 córdobas hasta 35 córdobas, lo que refleja un incremento del 40 por ciento. Rubén Arriola, de la Consultoría del Gestor al Consumidor, explica que el aumento ha sido paulatino y que en la semana pasada subió a 33 córdobas para luego incrementar dos córdobas más.
“El aumento se debe a la poca producción, porque no ha llovido lo suficiente por el fenómeno del niño y peligra que el mes de octubre que es copioso de lluvias, no llueva de forma contundente. Esto afecta la producción”, señala Arriola.
De acuerdo a datos del Instituto Nacional de Información de Desarrollo (INIDE), en agosto pasado el precio de los frijoles se encontraban en 36.82 córdobas la libra, por lo que una familia tenía que gastar 1,251.88 córdobas para poder comprar las 34 libras que estipula la canasta básica nicaragüense.
Aumento de cosecha no se refleja en baja de precios
Sin embargo, el presidente del Banco Central de Nicaragua (BCN) dijo este viernes 6 de octubre, que hubo un aumento en la cosecha de primera de este grano tan indispensable para la dieta de los nicaragüenses, pero esa creciente producción no parece reflejarse en una disminución de los precios.
“En el caso del frijol, se logró en esta cosecha de primera alcanzar un total de 80,523 manzanas produciendo frijol en todo el país… Lo que nosotros observamos es también que se produjo un rendimiento de 14.5 quintales por manzana y un aumento de la producción total comparado con la cosecha de primera del año pasado del 7 por ciento”, señaló Ovidio Reyes, titular del BCN.
Hasta julio de este 2023 Nicaragua había exportado 63 mil 780 kilogramos de frijoles, un 4.7 por ciento (2,889.7 kg) más que en el acumulado del mismo período de 2022 cuando se enviaron al exterior 60 mil 890 kg, siendo marzo el mes de mayor repunte.
Los ingresos recibidos hasta julio, por esas exportaciones suman 101.4 millones de dólares, es decir, 29 millones de dólares más que al acumulado hasta ese mes en 2022 (72.4 millones de dólares), lo que refleja un incremento del 40 por ciento. Siendo marzo el mes en el que se alcanzó el mayor número de ingresos con 22.5 millones de dólares.
Al revisar en las estadísticas del BCN, el número de exportaciones por mes, entre junio (10,564.1 kg) y julio (7,548.4 kg), se observa que hubo una caída de 3 mil 15 kilogramos, lo cual no explica el alza en el precio de la libra de frijoles en el mercado nacional, si se toma en cuenta el incremento de 7 por ciento en la producción de primera como lo estimó Ovidio Reyes.
¿Dónde están los frijoles?
“Yo no desestimo el acaparamiento ilícito de este producto que es de suma necesidad en la dieta nicaragüense. Hay muchos productores mayoristas, incluso comerciantes que compran las grandes cantidades de producción, la embodegan y cuando hay escasez comienzan sacarlo y venderlo un poco más caro, violentando la Ley 842, el Código Procesal Penal. Con el hambre del pueblo no se puede estar jugando”, resalta Rubén Arriola.
Hasta agosto el precio de la canasta básica alcanzaba los 19 mil 515 córdobas y todo apunta que al cierre de septiembre también haya aumentado y que mantenga su tendencia al alza, pues varios productos esenciales de la dieta del nicaragüenses han aumenta de precio y se espera que otros como el queso, tiendan a incrementar producto de la baja producción de leche como consecuencia del clima.
“El maíz es otro producto que puede ir aumentando de precio por la falta de lluvias, los perecederos como el tomate, la cebolla, la chiltoma, aumentaron de precio la semana pasada”, agrega el consultor.
Aumentan costos de producción
La falta de lluvias obliga a los productores a hacer uso del riego artificial lo que implica mayores costes en la producción, pero además de esto, Rubén Arriola explica que los altos precios en los insumos utilizados en las labores agrícolas tendrá “efecto dominó” en el bolsillo del consumidor final. A esto también se le debe sumar la falta de mano de obra producto de la migración.
“Entre noviembre y enero va a incrementar la escasez de algunos productos por la falta de lluvias. Todo mundo está esperando a la postrera… esto va a incrementar los costos en los mercados. Al haber menos producto estará más caro. Esto nos va a afectar a todos por parejo”, señala el consultor.
En cuanto a la situación bélica actual en Israel, Arriola está muy a la expectativa pues asegura que podría afectar en los precios de productos importados por Nicaragua y especialmente el del petróleo.
Nicaragua Investiga
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