Contrario al discurso oficialista en el que los funcionarios del régimen celebraban una “economía sana”, las exportaciones cayeron 2.4 por ciento en 2023 respecto a los números alcanzados en 2022.

De acuerdo al “Informe y Estadísticas de Comercio Exterior al IV Trimestre de 2023”, publicado por el Banco Central de Nicaragua (BCN), las exportaciones totales del año pasado se situaron en 7 mil 543.3 millones de dólares, es decir, 186.78 millones de dólares menos de lo que se exportó en 2022 cuando se alcanzaron los 7 mil 730.08 millones de dólares.

La caída de las exportaciones en 2023 se adjudica al sector de las zonas francas, uno de los más golpeados por factores internacionales e internos, en los que varias empresas han cerrado o reducido su personal por la poca demanda de prendas textiles, principalmente, pero también por las presiones de parte del régimen y hasta la retención de permisos de operación que obliga a varias empresas a tener que cerrar en Nicaragua y llevar sus operaciones a otros países.

“En términos acumulados, las exportaciones totales fueron de 7,543.3 millones de dólares en 2023, para una disminución interanual de 2.4 por ciento, como consecuencia de la disminución de 8.9 por ciento en las exportaciones de zona franca, que fue contrarrestado parcialmente por el aumento de 4.0 por ciento en las exportaciones de mercancías”, se lee en el informe publicado por el BCN.

Caída en exportaciones textiles provoca la pérdida de 10 mil empleos

Según la entidad emisora, el sector minero creció 22.4 por ciento, seguido de lejos por la manufactura con apenas 0.9 por ciento. Contrario a esto, se registra una disminución del -9.7 por ciento en el sector pesquero y un -5.3 por ciento en el agropecuario.

“Entre tanto, la disminución de las exportaciones de zona franca fue explicado por menores colocaciones de productos textiles (-15.2 por ciento), productos pesqueros maquilados (-30.2 por ciento), aceite de palma africana (-38.5 por ciento), entre otros”. agrega el BCN.

Caída en exportaciones ya se veía venir

La caída en las exportaciones era algo que ya se veía venir. En los últimos meses de 2023 se redujeron los volúmenes exportados y por tanto también los ingresos principalmente en el sector de las zonas francas, el que durante años ha sido uno de los principales impulsores del crecimiento del país tanto en exportaciones como en generación de empleos.

Sin embargo, los funcionarios del régimen siempre han tratado de presentar solo los buenos indicadores y obviar aquellos que podrían seguir afectando su ya decadente imagen gubernamental.

“El sector exportador es el que va a seguir manteniendo el impulso de la economía y que generará un crecimiento”, dijo el presidente del BCN, Ovidio Reyes, en entrevista a inicios de enero en el oficialista Canal 8 de televisión.

Cuando se le preguntó cuáles eran los factores que estaban “dinamizando la economía”, el funcionario explicó que el PIB (Producto Interno Bruto) en expansión, la inflación bajando y el empleo estable. «Esos son los tres indicadores claves macroeconómicamente hablando, y se le agrega la estabilidad del tipo de cambio y también la capacidad de exportación porque nuestro país es abierto… Cuando uno ve ese panorama lo que ve es una economía sana”, afirmó. Sin embargo, las cifras en exportaciones y la realidad observable difieren de este análisis.

Cierre de zonas francas

Nicaragua Investiga conoció de parte de algunos obreros de las zonas francas que Kontoor Brands, una empresa de ropa estadounidense, se vio obligada a cerrar sus operaciones en sus plantas de producción de San Marcos, en Carazo; Masatepe, Masaya; y otra en Managua, esto porque “el gobierno les retuvo permisos”, expresó un excolaborador de dicha empresa.

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En consecuencia, el grupo Denim dedicado a los procesos de lavandería de productos manufacturados principalmente procedentes de Kontoor Brands, se ha visto obligada a reducir drásticamente su personal, y se espera que cierre operaciones en marzo de este 2024 por la falta de clientes, según indicó una colaboradora de dicha empresa.

“No nos han dicho oficialmente, pero han corrido a un montón de gente, se han llevado varias de las lavadoras y la gente está muy preocupada, unos ya han renunciado. Andamos en busca de trabajo”, explicó la colaboradora que pidió anonimato.

El cierre de estas empresas se refleja en la disminución en la cantidad de trabajadores. De acuerdo a los reportes del mismo Banco Central, en 2022 el sector de la zona franca industrial tenía 138 mil 027 trabajadores directos y para 2023 se situó en 124 mil 893, es decir, perdió 13 mil 134 en un año.

Incluso, el mismo BCN muestra que entre 2022 y 2023 al menos seis empresas de zonas francas han cerrado, pasando de 187 a 181 en la actualidad.