Después que el régimen de Daniel Ortega diera una nueva estocada a la Universidad Centroamericana (UCA), organizaciones juveniles y estudiantiles se pronunciaron este viernes 11 de agosto, para expresar su rechazo al congelamiento de las cuentas bancarias de este centro de estudios superiores y resto de acciones represivas.
“Consideramos que estas medidas son una clara violación de los derechos fundamentales de los estudiantes y colaboradores, así como un intento de coartar la autonomía universitaria”, aseguran en un comunicado.
Al respecto, el líder estudiantil Lesther Alemán afirmó que han recibido de manera directa el “malestar y la inconformidad” de estudiantes por el hecho de no saber qué va pasar con su formación universitaria y que les han manifestado también la preocupación por la incertidumbre sobre “qué pasará con el pago de su semestre y sus títulos”.
La obsesión de los Ortega con la UCA: De estudiantes a verdugos
“La UCA no son los edificios, ni la infraestructura. La Uca son los estudiantes que hemos pasado por ella. La UCA es el cuerpo docente, la UCA es la compañía de Jesús. La UCA va a prevalecer”, expresó en una videollamada de respaldo al comunicado.
«Hacemos un llamado nacional e internacional, todo esto (el futuro de la UCA) está en manos de desquiciados que le temen al pensamiento», agregó.
A la dictadura, no le bastó congelar las cuentas bancarias de la UCA y de los miembros del Consejo Universitario y de algunos directores. También, por medio del Registro Público «inmovilizó» los bienes inmuebles de esa casa de estudios superiores.
Jóvenes líderes opositores leen pronunciamiento.
“Estas acciones infundadas, basadas en supuestas acusaciones de lavado de activos y financiamiento al terrorismo, formando parte de una estrategia para sofocar la resistencia y silenciar las voces críticas”, manifiesta el comunicado de los jovenes”, manifiesta el comunicado de los jóvenes.
Otra estocada a la UCA: Dictadura ordena inmovilizar sus bienes inmuebles
Para ellos, “la decisión de congelar sus cuentas y bloquear sus bienes es un intento de expropiación y robo que constituye un ataque directo a la educación y a la libertad académica».
«Esto pone en riesgo la continuidad de proyectos, investigaciones y programas que benefician a toda la comunidad universitaria y a la sociedad nicaragüense en general”, enfatizan.
Se quejan que el régimen de Daniel Ortega, ha expropiado 26 universidades privadas en todo el país, dejando a más de 37 mil estudiantes en el limbo académico, lo que significa que es la dictadura la que decide quién puede acceder a la educación superior, quiénes serán las autoridades, cuál será el plan de estudios académico y quiénes pueden ser los profesores.
Nicaragua Investiga
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