Un reciente comunicado del Destacamento Naval de Aguas Interiores de la Fuerza Naval del Ejército de Nicaragua advierte sobre la presencia de más lluvias, crecidas de ríos, aumento en la intensidad de los vientos y presencia de olas en los lagos Xolotlán y Cocibolca esta semana.
«Por lo antes mencionado, se les comunica mantenerse atentos al seguimiento de estos fenómenos y tomar en cuenta las medidas de seguridad necesarias para resguardar la vida y proteger las embarcaciones», dice la nota de prensa.
La Fuerza Naval también informó a los dueños de embarcaciones menores, pesqueras y turísticas que están dando seguimiento al desarrollo de estos fenómenos naturales, incluyendo la onda tropical número 10, que se prevé afecte la región entre este martes y miércoles.
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Movilización a puertos seguros
La institución castrense detalló que la variabilidad del clima afectará con lluvias, crecidas de ríos, intensificación de los vientos y presencia de olas en los lagos Xolotlán y Cocibolca. También solicitó a los navegantes tomar medidas de prevención para asegurar la vida y evitar incidentes lamentables.
«Se recomienda a las embarcaciones dedicadas a la pesca seguir de cerca las perturbaciones meteorológicas, tomar todas las medidas de seguridad durante la navegación y evitar la salida y entrada en las desembocaduras de los ríos para prevenir hechos lamentables. En caso necesario, deben trasladarse a puertos seguros.»
Sistema institucional con debilidades.
El lunes, Rosario Murillo, la número dos del régimen sandinista, anunció que diversas instituciones del Estado están trabajando para brindar una adecuada atención a las familias que podrían verse afectadas por el invierno a nivel nacional. Sin embargo, las lluvias han evidenciado que, a pesar de las extensas campañas mediáticas sobre la prevención de riesgos, las instituciones enfrentan grandes desafíos para gestionar las emergencias de manera efectiva.
Las intensas lluvias han causado muertes, afectaciones a la red vial, daños en viviendas, en drenaje pluvial, entre otros problemas. A pesar de las grandes inversiones en simulacros y campañas mediáticas sobre la protección de la vida, el sistema institucional aún muestra debilidades frente a las emergencias naturales.