Monseñor Silvio Báez partió de Nicaragua un día como hoy de 2019, luego de denunciar un intento de asesinato en su contra, advertido por la embajada norteamericana en nuestro país.
«Recibí una llamada del departamento de política de los Estados Unidos para decirme que tenían plena certeza que había un plan para asesinarme, que tuviera cuidado porque iba a ocurrir en los próximos días», dijo Baéz en esa ocasión.
Monseñor salió como una medida preventiva de Papa Francisco para resguardar su vida, pero dejó claro que él no había pedido salir del país y que se marchaba en medio de una profunda tristeza.
«Mi corazón de pastor seguirá aquí en Nicaragua», afirmó Báez y así fue. A lo largo de estos 12 meses, el Obispo Auxiliar de Managua ha seguido de cerca la situación de Nicaragua y ha utilizado las redes sociales para emitir mensajes de apoyo a la lucha cívica de los nicaragüenses.
Al parecer aún no es momento de su regreso, Báez no ha anunciado ningún cambio en la decisión papal sobre su estadía en Roma.
El más respetado
«Hoy cumple un año de exilio forzado el obispo auxiliar de Managua, Silvio José Báez, uno de los líderes religiosos más respetados de la Iglesia católica, y a la vez el ciudadano nicaragüense que genera mayor credibilidad y consenso entre la población», escribió en su cuenta de Twitter el periodista Carlos Fernando Chamorro.
La alusión de Chamorro está vinculada a varias encuestas, entre ellas una de la empresa regional de comunicación estratégica CCK Centromaérica, afiliada de la firma internacional Ketchum que lo ubicó en 2019 como la figura más influyente y en la que más creen los nicaragüenses.
Ese estudio también colocó a la Iglesia Católica como la institución de más confianza en el país con un 37%de aceptación.
La iglesia fue retirada del proceso de mediación entre el gobierno y la Alianza Cívica tras la salida de Báez y tuvo un papel reducido en las nuevas negociaciones que se abrieron nuevamente y que fracasaron. El nuevo canal de comunicación directo parece ser el Nuncio Apostólico Waldemar Stanislaw Sommertag, quien se involucró por ejemplo en las negociaciones para la devolución de la materia prima retenida al Diario La Prensa.
Durante la ausencia de Báez la iglesia ha sido atacada en varias ocasiones, una de ellas fue el 19 de noviembre de 2019 cuando un grupo de madres de presos políticos decidió hacer una huelga de hambre en la Catedral Metropolitana de Managua y fueron atacadas por turbas sandinistas que se tomaron el recinto religioso y golpearon al padre Rodolfo López y a la Sor Arelys Guzmán.
El pasado 3 de marzo durante la misa de cuerpo presente del poeta Ernesto Cardenal, turbas sandinistas también se tomaron la Catedral y al final golpearon salvajemente a periodistas que cubrían el evento, enviando a dos de ellos al hospital.
Días antes, varias pintas amenazantes también habían aparecido en las paredes de la Curia Arzobispal de Managua.
La crisis sociopolítica continúa, Antonia Urrejola, Comisionada de la CIDH aseguró a Nicaragua Investiga que en este año «la represión se ha sofisticado» y se han tomado los espacios de protesta por parte de la policía, de tal forma que el gobierno tiene instaurado un estado policiaco que impide el pleno goce de las libertades públicas.
Foto principal: Nicaragua Investiga
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