El Instituto Nicaragüense de Seguridad Social recibió en calidad de «donación» cuatro propiedades, una en Matagalpa y tres en Managua.

El anuncio se publicó este miércoles en el diario oficial La Gaceta que autoriza a la Procuraduría General de la República acudir a la notaría del Estado a hacer el traspaso legal de los bienes inmuebles.

A como hace la dictadura desde hace varios meses para ocultar el origen ilícito de estas propiedades, que es la confiscación masiva, ha asignado códigos a las mismas para evitar su identificación.

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En el caso de la propiedad en Matagalpa se trata de una propiedad identificada con el código BI-2KZOHLXG, y en el Managua se mencionan los códigos BI-9ADJMQL, BI-9AAHFT8, BI-9A81PD2.

Según indica el acuerdo presidencial, estas propiedades deben usarse por el INSS para «fortalecer la seguridad social de todos los nicaragüenses creando políticas y estrategias orientadas  a aumentar la cobertura de la seguridad social de los trabajadores y sus familias y fortalecer la capacidad institucional para la ejecución de proyectos».

Esta ha sido la forma que encontró la dictadura para rescatar de la quiebra al INSS luego de haberla llevado a un estado crítico, por usar los fondos de ahorro de los trabajadores para realizar préstamos a sus allegados que realizaron inversiones fallidas que nunca devolvieron.

EEUU hizo advertencia clara

La reciente aprobación de una nueva Ley de Protección de Fronteras por parte de la dictadura sandinista que permitió la confiscación de tajo más de 18 mil kilómetros de territorio, puso en alerta a Estados Unidos.

La Oficina para Asunto del Hemisferio Occiodental del gobierno estadounidense advirtió a través de sus redes sociales que «la confiscación masiva por parte del régimen Murillo-Ortega de las tierras dentro de los 15 kilómetros adyacentes a las fronteras nicaragüenses devasta decenas de comunidades y pone en riesgo las vidas y sustento de miles de personas».

Pero lo más preocupante es el llamado que hizo a sus ciudadanos. «Cualquier estadounidense que esté pensando en invertir en Nicaragua debe tener cuidado», indica el breve comunicado.

El llamado de Estados Unidos, pero sobre todo las acciones de la dictadura, podrían poner en riesgo la inversión extranjera directa y con ello afectar seriamente la economía del país.