Las autoridades judiciales de Nicaragua han formalizado acusaciones contra tres trabajadores de la cadena de pizzas Little Caesars por su presunta participación en un esquema fraudulento que resultó en pérdidas cercanas a los dos millones de córdobas para la franquicia.
Los acusados
El Ministerio Público ha señalado a Jeffrey José Cortés Olivas, quien desempeñaba funciones como contador general, Estefanny Carolina Suárez Martínez, responsable del área de tesorería y a Joel Emilio Cabrera Oregón, encargado de la gestión de instalaciones.
Modalidad del fraude
De acuerdo con las investigaciones oficiales, el monto total defraudado asciende a 1,957,199 córdobas, cantidad que habría sido desviada mediante un sistema de pagos simulados entre enero de 2022 y noviembre de 2024.
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El mecanismo utilizado consistía en la creación de conceptos de pago ficticios que incluían supuestos gastos por vacaciones, combustible y obligaciones tributarias municipales. Estos movimientos eran registrados en la plataforma contable SAP de Coralsa, la empresa que opera la franquicia en territorio nicaragüense.
Distribución de responsabilidades
Según los hallazgos de la fiscalía, cada uno de los imputados tenía un rol específico en el esquema:
- Cortés Olivas se encargaba de alterar los registros en el sistema contable
- Cabrera Oregón ejecutaba las transferencias hacia cuentas bancarias personales
- Suárez Martínez proporcionaba cobertura contable a las operaciones irregulares
Este caso permanece bajo investigación, mientras las autoridades continúan evaluando el alcance total del daño económico causado a una de las franquicias de pizza más reconocida a nivel internacional.
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