Hasta hace seis días, Gustavo Castro Jo presumía en su cuenta de Facebook la entrega de obras en el colegio Horacio Hodgson, acto en el que estuvo acompañado de parte la directiva municipal de Bluefields, así como de regionales y miembros de la empresa que aseguró invirtió 75 millones de córdobas para mejorar la infraestructura educativa.
Pero en un giro muy usual en los últimos meses por parte de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, a Castro Jo lo destituyeron del cargo, lo mismo que a la vicealcaldesa Carla Martín y el administrador municipal Luis Gutiérrez.
La orden vino de Murillo, quien busca mantener el control férreo sobre el país por leales a su figura, en una purga que ha dejado a casi 40 ediles destituidos en los últimos años.
Aunque figuraba como secretario municipal del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), Castro Jo fue defenestrado por la falta de «lealtad» a la pareja presidencial nicaragüense.
Según el sitio web Despacho 505, en el año 2024 se registró la destitución de 24 alcaldes que impuso el Consejo Supremo Electoral para el periodo 2023-2027. Mientras que Confidencial hablaba de «al menos 31 alcaldes y cinco vicealcaldes de 28 municipios de Nicaragua han sido destituidos, sin explicación oficial, desde enero de 2023» hasta inicios de este 2025, de acuerdo con datos propios de ese medio de comunicación.
Desde cuando Castro Jo era alcalde de Bluefields
Castro Jo llegó a la Alcaldía de Bluefields en enero de 2018 para un primer periodo hasta el año 2022. Acompañado por credenciales como ser máster en economía y exrector de la Universidad de Bicu, la narrativa oficial lo vendió como «una gran esperanza» para la población y los empresarios de la localidad, en la Región Autónoma de la Costa Caribe Sur del país.
El medio Hora Cero, una plataforma para Centroamérica, destacó que una de las quejas contra Castro Jo era el nepotismo. Su hijo Lance Castro lo llamaban «el alcaldito» de la comuna, dada su participación en las diferentes actividades municipales. Según esta organización, en Bluefields esa no era la única irregularidad.
Además, en 2022 por hechos delictivos salieron a relucir figuras públicas del sandinismo en la localidad. Unaa de ellas, Geovanny Bojorge Espinoza, a quien encontraron culpable por violación y abuso sexual contra una menor de edad; a la exedil Yamileth Cruz García, la detuvieron junto a su pareja, Elias Vargas Dinarte, por la comercialización de marihuana. Mientras que a Antony Prior, secretario del Consejo Municipal de la Alcaldía, lo acusaron de la venta de cocaína y otras sustancias ilegales controladas, dijo Hora Cero.
Tanto Bojorge Espinoza como Cruz García eran miembros del FSLN, que busca ahora la lealtad no del régimen sino a Murillo, copresidenta y que quiere imponer a sus fichas en diferentes estratos del Estado nicaragüense.
Periodista Nicaragua Investiga
