Familiares del joven Max Jerez Meza, de 27 años de edad, excelencia académica de la carrera de Ciencias Políticas en la extinta Universidad Politécnica de Nicaragua (Upoli), ahora Universidad Nacional Politécnica (UNP), temen que pueda perder sus registros académicos tras el cambio institucional a manos del Consejo Nacional de Universidades (CNU) bajo la dirección de Ramona Rodríguez, también exrectora de la Unan-Managua.
Los familiares manifestaron el temor porque podría ser una forma de «represalia» por su participación en las manifestaciones antigubernamentales, a como sucedió en 2018, cuando la Unan-Managua -bajo la dirección de Rodríguez- expulsó a varios estudiantes opositores.
«A raíz que le quitaron la personalidad jurídica a la Upoli, nosotros como familiares creemos que la nueva administración de dicha universidad pueda borrar los registros académicos de Max Jeréz Meza, y de muchos estudiantes, que participaron en las protestas», indicó un familiar del preso político, quien pidió el anonimato por temor a represalias.
«Escuchamos que (la universidad) tomaría esa represalia contra los estudiantes que participaron en el estallido de la crisis sociopolítica de abril de 2018», agregó.
Jeréz, cursaba el tercer año de la carrera en esta casa de estudios superiores cuando en abril de 2018 decidió unirse a las manifestaciones antigubernamentales, alejándose completamente de la continuidad de su plan de estudios debido a su activismo en organizaciones juveniles y opositoras a Daniel Ortega, lo cual le ha costado persecución, asedio, amenazas, exilio y cárcel.
El joven fue mejor alumno por dos años en la Upoli, incluso clasificó como uno de los 10 mejores estudiantes del Consejo Nacional de Universidades (CNU), misma institución que hoy se ha tomado el recinto universitario bajo la creación de tres nuevas casas de estudios superiores estatales.
Incluso, desde sus estudios de primaria y secundaria en el Instituto Douglas Sequeira, Max Jerez se destacaba por su excelencia académica.
Aunque el CNU ha informado que cumplirá con la continuidad del plan de estudios de esta comunidad universitaria de la extinta Upoli, se desconoce lo que pasará con los registros académicos de muchos estudiantes que salieron al exilio o dejaron sus estudios en 2018.
Max Jerez, el «profesorito» rehén de la dictadura
Nicaragua Investiga intentó comunicarse con las autoridades de la UNP, sin embargo no respondieron a nuestras llamadas telefónicas.
«Max Jeréz es inocente», dice AUN
Este viernes 11 de febrero, el líder estudiantil y miembro de la Alianza Universitaria Nicaragüense (AUN) se enfrenta a un juicio en su contra por el delito de «conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional», por el cual podrían ser sentenciado entre 8 a 15 años de cárcel, como fue el caso de Lesther Alemán.
A Jeréz y otros estudiantes los acusan de supuestas “cabecillas de toma y destrucción” de la UPOLI y la UNAN-Managua, donde supuestamente “cometieron delitos de robo con intimidación, secuestros, lesiones graves, violaciones, extorsiones, destrucción y daños múltiples, durante el fallido intento de golpe de Estado en el año 2018”.
«El deseo de querer un país justo, libre y democrático llevó a Max Jerez a salir a las calles en abril 2018, este ha sido su único delito ¡Max Jerez es inocente!», denuncia AUN.
Lesther Alemán fue sentenciado este pasado jueves, a 13 años de cárcel por el delito de «conspiración». Según la jueza Nadia Tardencilla, el líder universitario queda inhabilitado para
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