Este martes 12 de diciembre, la vocera gubernamental y número dos del régimen sandinista, Rosario Murillo, anunció que en conjunto con la Corporación Estatal de Energía Atómica de Rusia (ROSATOM) están “fortaleciendo” un proyecto para crear un “centro de medicina nuclear” Nicaragua, una promesa más que es poco probable que se efectúen en el país por distintos factores, según explica un analista.
“Hemos estado ahí (en la) Corporación Estatal de Energía Atómica de Rusia, ROSATOM, viendo el centro de medicina nuclear, ayer y hoy también trabajando para el fortalecimiento del proyecto de medicina nuclear, centro de medicina nuclear en nuestra Nicaragua”, indicó Murillo, referente a la vista que una delegación nicaragüense encabezada por su hijo Laureano Ortega Murillo, realiza en la nación gobernada por Vladimir Putin.
De acuerdo a la explicación de la vocera gubernamental, un centro de esta envergadura crearía mejores resultados en temas de salud, especialmente en la “atención y la sanación alrededor del cáncer”.
Los fallidos megaproyectos (pocos mencionados) con que Ortega quiso engañar a los nicaragüenses
Nicaragua no tiene recursos para este tipo de proyectos
Sin embargo, para que este tipo de proyectos puedan llevarse a cabo se requiere de capital humano altamente calificado, además de millonarios recursos con los que el país no cuenta actualmente, y que en consecuencia, podría llevar una vez más a otro de los tantos proyectos fallidos del régimen que solo quedó en promesas, según explica el rector de la confiscada Universidad Paulo Freire (UPF), Adrián Meza.
“Hay factores que hay que considerar, primero si tenemos en el país los recursos humanos adecuados como para impulsar una tarea de esta naturaleza; dos, si no los tenemos qué capacidades hay para traer de afuera un recurso humano con nivel científico que esa tarea requiere; y tres, efectivamente si el Estado está dispuesto a invertir en serio en un proyecto de esta naturaleza”, expone Meza.
El catedrático sostiene que si se trata de otro “teatro” como el canal interoceánico ya se sabe que va a ser otro fracaso y que cuando el régimen hace este tipo de anuncios siempre se tiene la duda “de si efectivamente es algo para publicidad o si realmente es algo en lo que vale la pena detenerse”.
“Otros países cuando anuncian este tipo de proyectos o programas es porque ya han resuelto estos nudos gordianos, es decir, el capital científico, el recurso humano que se requiere para esto, el capital financiero para una empresa de esta naturaleza y además de eso las relaciones internacionales que se requieren. Viniendo del régimen que ya nos ha mentido en otras circunstancias sobre megaproyectos, tampoco podemos validar de primas a primeras que es cierto, que va a haber en Nicaragua un centro de medicina nuclear, habrá que verlo”, explica el rector desde su exilio en Costa Rica.
Los proyectos fallidos
El régimen no es la primera vez que anuncia proyectos que ni siquiera llegan a pasar de anuncios mediáticos. En 2012 vendió la idea de un megaproyecto canalero de manos del empresario chino Wang Jing, que partiría al país en dos y uniría el océano Pacífico con el Atlántico, y que sacaría a Nicaragua de la pobreza, pero tras cuantiosas aportaciones presupuestarias y luego de 4 años de que se debió haber concluido, no existe ni un solo avance y los nicaragüenses siguen siendo igual o peor de pobres que antes.
En tanto de Rusia, prometió un Instituto Latinoamericano de Biotecnología llamado MECHNIKOV, S.A., este sí se concretó, pero luego de años de haber sido construido no se conoce que haya tenido un avance significativo en su ramo, pero contrario a su naturaleza ha sido utilizado para “malversar fondos”, según una investigación en Rusia contra Viktor Trukhin, cónsul honorario del régimen Ortega-Murillo en ese país.
Mechnikov fue usada por cónsul honorario de Ortega para malversar fondos, según acusación
Ortega también ha prometido un satélite, un megaproyecto de riego, un autódromo, un puerto de aguas profundas, solo por mencionar algunos ejemplos.
Por estas malas experiencias, el rector de la UPF se muestra incrédulo con el nuevo anuncio de Rosario Murillo.
“Con el gobierno nunca sabés cuándo está mintiendo y tampoco sabés cuándo está diciendo la verdad porque nos ha mentido tantas veces en tantas cosas que tiene el beneficio de la incredulidad”, agrega Adrián Meza.
Régimen tiene que justificar su actuar
Para el catedrático, proyectos como este de medicina nuclear, que muchas veces quedan solo en palabras, forman parte de “la necesidad política de justificar frente a la población”, este “viraje” hacia la intensificación de las relaciones con China y Rusia “con la consecuencia que eso tiene”.
“Si el gobierno necesita decir ‘miren los beneficios’, porque efectivamente esa relación a largo plazo, desde el punto de vista de la geopolítica puede tener consecuencias. Un gobierno republicano en el poder en Estados Unidos no es cierto que va a tener una actitud contemplativa mientras el gobierno de Nicaragua se echa en brazos de Rusia y China, entonces es necesario justificar a la población qué ventajas nos da haber apostado por el marco de influencia geopolítica”, explica.
Meza toma como referencia a Estados Unidos, precisamente porque es el socio principal de Nicaragua en materia comercial, y en los últimos años su importancia creció con el impulso que han tenido las remesas procedentes de esa nación, cuyas perspectivas de economistas son que alcance el 28 por ciento del producto interno bruto (PIB) del país este 2023.
“Van a haber otras noticias como esa, verdades o mentiras, pero habrá por la necesidad de justificar ese viraje de las relaciones internacionales de Nicaragua”, finaliza Adrián Meza.