El Congreso de los Diputados pidió al gobierno español promover ante la Unión Europea la imposición de sanciones contra los dirigentes de Nicaragua con el propósito de aumentar la presión y que «se restablezcan» las libertades en el país ante el incremento de la represión contra críticos de la administración sandinista.
La petición es resultado de una proposición no de ley pactada por los partidos PP, Vox y PSOE, y que ha sido ratificada con 28 votos a favor y siete en contra en la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara Baja. A través de esta, se pide al gobierno español que condene los últimos ataques del «régimen dictatorial» de Nicaragua en contra de actores políticos y sociales de oposición y medios de comunicación independientes.
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Asimismo, solicitan «promover todas las acciones políticas y diplomáticas necesarias en defensa de las libertades y los derechos humanos en Nicaragua». El Congreso también insta al Ejecutivo de España a «exigir la liberación inmediata de todos los presos políticos y defensores de derechos humanos» y desconocer los resultados de las elecciones previstas para el próximo 7 de noviembre «mientras no se garanticen todos los derechos de la oposición y la transparencia del proceso con medidas como la independencia del Consejo Supremo Electoral (CSE) y la presencia de observadores independientes».
Acorralamiento a Ortega
La solicitud del congreso español se suma a los diversos pronunciamientos emitidos desde la comunidad internacional durante las últimas semanas, ante la detención de más de una veintena de opositores nicaragüenses, que van desde precandidatos presidenciales, activistas, empresarios y periodistas.
Los diputados reclaman que España promueva y lidere «en las instituciones europeas la aprobación de sanciones contra los dirigentes del régimen, que aumenten la presión internacional y ayuden a restablecer el Estado de Derecho y las libertades en Nicaragua».
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La portavoz del PP, Belén Hoyo, arremetió contra el mandatario Daniel Ortega, acusándolo de llevar a cabo «un nuevo golpe de Estado» por las últimas acciones «que limitan el derecho de los nicaragüenses a elegir y ser elegidos», provocando que «hasta aliados tradicionales como México y Argentina le están dando media espalda» al presidente; según cita el medio Infobae.
Además expresó durante su intervención en el congreso que “un ataque así no se debería permitir”, en alusión a la carta diplomática visceral que emitió el gobierno de Nicaragua en contra de la Ministra de Asuntos Exteriores de España Arancha González, a quien llamó «mandamás trasnochada» y la acusó de mostrar una «ignorancia atrevida» en las críticas a su gestión.
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