En ocasión de conmemorarse este viernes el Día Mundial de la Prevención del Suicidio, la vicepresidenta de Nicaragua, Rosario Murillo, anunció la realización de charlas y conferencias sobre la salud mental.
Murillo argumentó que este temas es importante, ya que según ella existe un bombardeo comunicacional que está afectado a las personas.
“Conmemorando mañana el día de prevención del suicido (se realizarán) charlas, conferencias y atención a la salud mental, porque si hay algo que se ha afectado también no solo es la atención a las otras enfermedades que veníamos queriendo controlar en el mundo como decíamos ayer, la tuberculosis, la malaria, el VIH, sino también el deterioro de la salud mental porque estamos sometidos a un bombardeo comunicacional que no deja de sembrar temor”, expresó a través de los medios oficialistas.
Rosario Murillo pide acostumbrarse a convivir con el COVID-19
El temor paraliza, afirma
Murillo dijo que “hay que cuidarse responsablemente”, pero que “a veces el temor protege, pero cuando el temor llena nuestras vidas nos paraliza” y es entonces que se afecta la salud mental “y hay personas que por fragilidades de distintos tipos, traumas, deciden quitarse la vida”.
En las últimas semanas Murillo ha acusado a los medios de comunicación de “terrorismo comunicacional” por informar acerca del repunte de casos de COVID-19 en Nicaragua.
La problemática del suicidio en Nicaragua crece con los años en medio de la crisis social y política. El último Anuario Estadístico de la Policía Nacional cuenta 344 casos de suicidio en 2020 y remonta su conteo hasta el año 2007, en el que se cuentan 143. En ese periodo de 13 años, 3 251 nicaragüenses decidieron quitarse la vida.
Los casos de suicidio han crecido exponencialmente desde el año 2007. El Anuario recoge que, a partir de 2010, los casos apenas superan la marca de los 200, se reducen ligeramente en 2013 a 180 y en 2018 se elevan a por encima de los 300 casos.
En 2020 se registraron 344 casos, la mayor cifra desde el año 1996, el último año que se registra en el Anuario Estadístico de la Policía Nacional para el año 2000.
El bombardeo de Rosario Murillo
La vicepresidenta nicaragüense comparece de lunes a viernes través de todos los medios de comunicación oficialistas dando un reporte del trabajo gubernamental, las alcaldías, el clima, los sismos y una gran variedad de temas, en los que no desaprovecha para dirigir furibundos ataques verbales y acusaciones a opositores, periodistas, empresarios, Estados Unidos y la Iglesia Católica. Esas comparecencias suelen durar entre una veintena de minutos hasta casi una hora.
La problemática del suicidio en Nicaragua crece con los años en medio de la crisis social y política. El último Anuario Estadístico de la Policía Nacional cuenta 344 casos de suicidio en 2020 y remonta su conteo hasta el año 2007, en el que se cuentan 143. En ese periodo de 13 años, 3 251 nicaragüenses decidieron quitarse la vida.
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