El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) publicó su informe anual del 2021, en el que describe el año como uno de los más difíciles en la defensa de derechos humanos y las principales razones fueron la destrucción y cierre de espacios para interponer denuncias formales. «Las y los nicaragüenses nos quedamos sin protección en nuestro propio país, como si se tratase de una gran cárcel donde únicamente impera el terror y la opresión», señala el Cenidh.
El informe detalla que el 2021 fue un año en el que se evidenció la «destrucción institucional», tras la consumación de un nuevo mandato de Daniel Ortega luego de la celebración de las polémicas votaciones del 7 de noviembre. En esa fecha el Cenidh denunció el «cerco informativo en la farsa electoral», debido a la negativa de las autoridades de migración de permitir la entrada a corresponsales y periodistas extranjeros para la cobertura de las votaciones en el país.
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Durante esta jornada de los comicios electorales, el Cenidh también criticó y denunció las detenciones a opositores durante los días previos al 7 de noviembre, y durante la jornada de elecciones. El organismo defensor de derechos humanos mencionó en esa denuncia que en Nicaragua había ocurrido «otra noche de los cuchillos largos».
Al pendiente de otras violaciones de derechos humanos
El Cenidh reportó que a lo largo de todo el año realizó 951 atenciones, recibió 255 denuncias nuevas, dio seguimiento a 696 casos de años anteriores y ejecutó 15 defensas jurídicas. También mantuvo 25 medidas cautelares vigentes ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Uno de los seguimientos a los casos realizados por el Cenidh fue el de la familia Flores Castillo, tras el fallecimiento de Santos Flores en la cárcel «La Modelo» de Tipitapa. Los defensores de derechos humanos destacaron que Flores fue apresado, tras denunciar a Daniel Ortega por violar a su hermanita de 15 años.
«Desde el Cenidh siempre estuvimos acompañando a la familia de Santos Sebastián y denunciando los actos de tortura física y psicológica que le hicieron padecer durante todos estos años de encierro injusto», expresaron.
Otros informes dejan a Nicaragua con peores referencias
Informes nacionales e internacionales también expresaron una baja valoración de Nicaragua en relación a la libertad de prensa y violaciones a derechos humanos durante el 2021. Según la Fundación Andina para la Observación y Estudio de Medios (Fundamedios), Nicaragua ha sido, durante el 2021, un mal ejemplo para la región centroamericana, y ha sido uno de los países que más periodistas apresados mantiene.
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La abogada, Martha Patricia Molina realizó un informe en el que se evidenció que en las cárceles de Nicaragua se cometen al menos 38 métodos de torturas diferentes. Entre esas se encuentran: levantar las uñas y arrancarlas con tenazas, asfixias con bolsas plásticas, violaciones sexuales a mujeres, desprendimiento de dientes, acuchillamientos, entre otros.
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