Aníbal Manzanarez, sacerdote del municipio de Terrabona, en Matagalpa, denunció que la policía leal a Daniel Ortega le impuso vigilancia para evitar realice actividades religiosas en la comunidad.
«Mis buenos amigos y hermanos, solamente notificarles que la Policía esta mañana me ha notificado que no tengo permiso para salir, no puedo salir a las calles, a procesiones, a actividades fuera del templo parroquial”, informó el sacerdote en un audio publicado en sus redes sociales.
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El religioso advirtió que los agentes policiales lo están vigilando. «Creo que me están vigilando. Entonces les pido siempre a ustedes siempre sus oraciones», enfatizó el sacerdote.
En entrevista con el Diario LA PRENSA, el sacerdote Mazanares dijo que «la prohibición es solo para las procesiones y actividades fuera de la iglesia. Algunos medios han mal interpretado la situación. Esa es mi explicación”.
La parroquia de Terrabona pertenece a la Diócesis de Matagalpa, misma que administra el obispo Rolando Álvarez, quien tiene más de una semana sin poder salir de la curia episcopal debido a que esta se encuentra rodeado por policías armados. A Álvarez la dictadura le abrió una «investigación» por supuestamente incitar a la violencia.
En el caso del padre Manzanares, este afirma que esta situación es similiar a “que me estén matando”, y llamó a los grupos parroquiales a intensificar y ser «críticos ante esta situación que vivimos, dolorosa».
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El párroco advirtió que esta es lucha espiritual contra fuerzas oscuras. «Si oramos vamos a vencer las fuerzas del enemigo, porque esto no es una lucha corporal, no es una lucha humana, es una lucha espiritual, contra espíritus malignos, contra la fuerza de la oscuridad, porque el diablo está aleteando”.
Nicaragua Investiga
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