Ya fue trasladado hacia su natal Nicaragua el cuerpo sin vida de Carmelita Erdiana Julio Peachy, una migrante indígena, de 61 años, que murió el 30 de noviembre en Costa Rica luego que presuntamente se le negara atención médica en ese país por no tener documentos migratorios.
La repatriación se realizó el lunes 4 de diciembre rumbo a Laguna de Perlas, donde era originaria la miskita. Para ello, la familia pidió prestado dinero ante la deuda de más de medio millón de colones que se les acumuló y por no contar con recursos económicos, según la información compartida por los familiares de la nicaragüense a la Asociación Intercultural de Derechos Humanos (Asidehu).
Los restos fueron trasladados con urgencia, sin embargo, los parientes están a la espera de la autopsia, la cual la Morgue en Costa Rica la entregará entre un mes a tres meses después. Una situación que les pareció «extraña» a los defensores de derechos humanos que se encuentran dando seguimiento al caso.
El 4 de diciembre, Asidehu solicitó por escrito una reunión con las autoridades de la Dirección General de Migración y Extranjería de Costa Rica para abordar la «gravísima situación» del fallecimiento de Carmelita Julio Peachy y los casos violatorios de derechos humanos en el contexto de la migración. El documento fue recibido en horas de la mañana.
Jhoswell Martínez, presidente de Asidehu, dijo a Nicaragua Investiga que también se reunirán con autoridades del gobierno y solicitaron de urgencia una reunión con diputados de la Asamblea Legislativa para tratar el caso y las denuncias recibidas por migrantes.
A su vez, piden a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) que realice una investigación sobre el hecho.
Asidehu presentará una denuncia ante la Presidencia del CCSS y el hospital donde no fue atendida la señora de la tercera edad.
Realizarán manifestación en demanda de justicia
Al menos 15 organizaciones defensoras de derechos humanos se darán cita este miércoles 6 de diciembre, a partir de las dos de la tarde, frente a la Asamblea Legislativa en San José, Costa Rica, para exigir justicia por la muerte Carmelita Julio Peachy.
«A ella se le negó atención pese a que iba chineada y sin poder moverse por sí sola, todo por no tener papeles migratorios ni seguro. ¿Es justo esto?», cuestiona Asidehu.
Más de dos meses intentando obtener refugio
Según la denuncia, Julio Peachy salió de Nicaragua de manera forzada ante el incremento de la violencia y la invasión de colonos en las comunidades indígenas.
La miskita nicaragüense intentó solicitar refugio desde el 15 de septiembre pasado, pero le fue «imposible» formalizar su trámite «por las medidas administrativas vigentes que permiten la tramitación de solo 70 personas al día».
Al no tener un documento de identidad migratorio «no podía trabajar, pasando hambre y penuria«, denuncia Asidehu.
La señora tuvo que reasentarse en una finca llamada «Bananito-Limón», de la provincia de Limón, donde una conocida le brindó un espacio de trabajo provisional a cambio de techo y alimento.
El 27 de noviembre, Julio Peachy enfermó de «dolores de cabeza, se le opacaron los ojos, tenía dolor en sus huesos y se le inflamaron las extremidades inferiores». Pese a varios intentos, «se le negó constantemente la atención médica por el Ebais (unidades de servicios de salud primarios en Costa Rica)». La señora falleció el 30 de noviembre a las 7 de la noche.