El gobierno de España descarta un diálogo con la dictadura nicaragüense encabezado por Daniel Ortega. El titular del Ministeio de Asuntos Exteriores de esa nación europea, José Manuel Alvares, expresó que se procura tener buenas relaciones con todos los países de la región, pero que el diálogo con Nicaragua es difícil.
En declaraciones a la agencia EFE, el alto funcionario español fue claro: «Es difícil tener un diálogo en estos momentos, lo hablo con muchos colegas de la región y también con colegas europeos. Por el momento, no vemos que haya respuesta a lo que a nosotros nos gustaría».
Alvares recordó que España apoya las sanciones impuestas por Europa a la administración sandinista, además que ha otorgado la nacionalidad española a aquellos nicaragüenses despojados de la suya y declarados «traidores a la patria».
Periodistas «en extinción” en Nicaragua por culpa de la dictadura
Al respecto, catalogó el despojo de la nacionalidad nicaragüense a opositores como una «pena infamante» por parte del régimen de Daniel Ortega.
El ministro subrayó también España quisiera tener buenas relaciones con todos los países de América Latina y que estas se basaran en principios comunes como «el respeto a los derechos humanos y a la democracia».