Jaime Hermida Castillo, embajador y representante permanente de Nicaragua ante las Naciones Unidas desde 2018 recibió un nuevo nombramiento este 02 de agosto, según consta en el diario oficial La Gaceta.
El acuerdo presidencial 125-2024 indica que ahora también ostentará el cargo de «embajador extraordinario y plenipotenciario de la república de Nicaragua ante el gobierno de la República de Corea, en calidad de concurrente, con sede en la Organización de Naciones Unidas, Nueva York, Estados Unidos de América».
El doble cargo de este funcionario muestra su cercanía con la pareja dictatorial y privilegios que por ello recibe, ya que desde 2007, cuando Daniel Ortega retomó el poder, él forma parte de la misión de Nicaragua ante la ONU, lo cual no es muy común en el régimen que mantiene una política de purgas internas agresiva y por lo cual sus funcionarios no suelen tener períodos tan largos de servicio.
Multi cargos, los premios de Ortega
Entregar múltiples cargos a embajadores es una práctica común en el régimen de Daniel Ortega. El caso más emblemático es el del ex dirigente de la sandinista Unión Nacional de Estudiantes UNEN, Luis Andino, quien es considerado un «súper embajador», ya que ostenta al menos cinco cargos diplomáticos en África, siendo estos Burkina Faso, Ghana, Togo, Níger y Benín.
Sin embargo, los representantes diplomáticos de la dictadura son también constantemente removidos de sus cargos, siendo la embajada de Cuba la más inestable. En los últimos tres años más de cinco embajadores, Siddhartha Marín Arauz, es el caso más insólito Solo duró 11 días.
Y el caso más reciente es el de la cantante sandinista Tamara Vanessa Martínez Sarantes quien fue designada en el cargo de Ministra de la Mujer apenas el 15 de mayo de este 2024 y el 29 de julio el diario oficial La Gaceta publicó «renuncia», es decir, dos meses después.